El plano de la sima del Taro da Cruz será trazado en noviembre

Francisco Albo
francisco albo MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

A. SOMOZA

La cueva de O Courel fue visitada por primera vez hace un año

26 oct 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

Hace poco más de un año, a comienzos de octubre del 2011, miembros del Espeleo Club de Descenso de Cañones (ECDC) y del club berciano Espeleo Casteret exploraron por primera vez la sima del Taro da Cruz, una gruta de la sierra de O Courel que nunca había sido visitada por nadie. Este primer descenso estuvo precedido de un largo trabajo de preparación, ya que para acceder a la cueva fue necesario desobturar su parte alta, taponada por rocas y restos de reses muertas arrojadas a la sima hace muchos años. La labor fue muy ardua, pero permitió a los espeleólogos explorar un paraje natural de la sierra hasta entonces inaccesible.

El ECDC se dispone ahora a completar el trabajo realizando un levantamiento topográfico lo más exhaustivo posible de la sima, lo que se pretende llevar a cabo entre los días 10 y 11 de noviembre. El club espeleológico gallego hizo un llamamiento a través de su página web para que todas las personas que lo deseen participen en esta nueva exploración. «Por supuesto, para entrar en la cueva hay que tener conocimientos de espeleología y pertenecer a alguna asociación federada, pero los demás también pueden venir a ver cómo se hace este trabajo si les interesa», señalan desde el colectivo.

Trazar la topografía de una cueva es el procedimiento habitual que siguen los clubs espeleológicos cuando se descubre una cavidad inexplorada, a fin de facilitar la visita a otros aficionados que vengan después y para ayudar a incrementar el conocimiento sobre estos espacios naturales. Los miembros del ECDC consideran además que la sima del Taro da Cruz es muy adecuada para realizar prácticas de descenso en grutas verticales. «No es de las cuevas más grandes y más vistosas que hay en la zona, pero no está nada mal para desarrollar estas actividades, aunque no sirve para hacer prácticas con niños, porque para eso hacen falta lugares más accesibles», señalan a este respecto. La sima, además, se encuentra a escasa distancia del cámping de Esperante, el único que existe en la sierra.