El secretario xeral de Medio Rural e Montes, Tomás Fernández Couto, firmó ayer en la escuela de Capacitación Agraria de Monforte con 29 alcaldes de la provincia convenios de colaboración incluidos en los planes de mejora de infraestructuras rurales que financian las administraciones central y autonómica. Al acto también asistieron el director xeral de Desenvolvemento Rural, Antonio Crespo, y la delegada territorial de la Xunta, Raquel Arias.
Fernández-Couto explicó que las ayudas que van a recibir estos ayuntamientos tienen como objetivo «mellorar a calidade de vida da poboación que reside nestas zonas rurais e contribuír a arranxar as deficiencias que persisten nalgunhas delas». Según destacó, las inversiones llegan además en un momento en el que se constata una tendencia de retorno de las ciudades al campo como consecuencia de la crisis económica.
Por lo que respecta a los convenios correspondientes al sur de la provincia, Taboada, Sober, Chantada y Quiroga son los municipios más beneficiados por la mejora de las infraestructuras rurales, con inversiones que ascienden a 103.808, 99.814, 93.629 y 91.677 euros, respectivamente. Sin salir de esta zona, Pantón recibe del plan 92.671 euros, O Saviñao 83.567, Monforte 83.275, y Carballedo 82.130.
A dos bandas
En total, las ayudas suman algo más de dos millones de euros, que financian la Consellería do Medio Rural y el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. El convenio establece que corresponderán a la Xunta las actuaciones en materia de infraestructuras rurales, mientras que el ministerio asume el financiamiento de de las obras de mejora de caminos agrícolas y pistas rurales. Esta parte del plan complementa , según destacó el secretario xeral de Medio Rural e Montes, actuaciones desarrollas por la Xunta durante el pasado año.
«O Estado pon dúas terceiras partes e a Xunta o terzo restante, a xestión técnica e administrativa e a contratación de todos os proxectos», dijo Fernández-Couto, que señaló que la mayor parte de las actuaciones previstas estarán ejecutadas a finales del verano.
La delegada de la Xunta en Lugo agradeció el esfuerzo que supuso el desplazamiento hasta Monforte para algunos alcaldes y precisó que la firma de convenios se llevó a cabo conjuntamente «para axilizar o proceso e acurtar os prazos». «O importante é que se poidan firmar os contratos para facer as obras canto antes», manifestó Raquel Arias.
En el reparto de las ayudas se atendió a criterios de población, dispersión y entidad de los núcleos rurales y actividad agrícola, según la Xunta.