Miles de personas llegadas de diversas localidades llenaron el recinto instalado en la plaza de Galicia
11 mar 2012 . Actualizado a las 07:05 h.La crisis no parece haber perjudicado mucho a la Feira do Viño de Chantada al alcanzar su trigésima edición, una cifra que hace de ella la segunda cita vinícola más antigua de la Ribeira Sacra. El viernes por la tarde, cuando se inauguró la feria, ya fueron muchas las personas que se acercaron al recinto instalado en la plaza de Galicia, donde están ubicados los puestos de las trece bodegas participantes.
La afluencia creció considerablemente ayer por la mañana con la llegada de un gran número de visitantes procedentes de otras localidades que llenaron de bullicio el centro de la villa. El tiempo cálido y primaveral que reina en el sur lucense sin duda contribuyó en buena medida a intensificar el ambiente festivo. El tráfico se complicó bastante en algunos momentos, pero no llegaron a registrarse problemas de consideración por este motivo.
Vecinos y visitantes, además de probar los vinos servidos en las casetas de los bodegueros, se acercaron también a los puestos de la cuarta feria de oportunidades y la tercera muestra de artesanía que organiza paralelamente la asociación local de comerciantes. El grupo de gaitas Os Barrios, la charanga Estoupacaldeiros y el conjunto de zanfonas de Tradescola se encargaron de poner la nota musical en el recinto a lo largo de la jornada. A última hora de la tarde se esperaba que -como es tradicional en la feria- la muchedumbre fuese aún mayor que durante el día. Las orquestas Compostela y América se encargaron de amenizar la verbena prevista para el remate de la segunda jornada.
Más puestos
El concejal Xosé Manuel Ledo, miembro de la comisión organizadora, señaló que la impresión general de ayer era que la feria ha logrado atraer a un mayor número de visitantes que el pasado año a pesar de la reducción de su presupuesto -que bajó de 65.000 a 40.000 euros- impuesta por la actual situación económica. «O que é seguro é que os chiringuitos e barracas son máis que os que houbo outras veces», señaló.
En cuanto al volumen de las ventas de vino, aunque ayer era muy pronto para hacer valoraciones, Ledo señaló que en opinión de los bodegueros participantes el aspecto comercial está resultando bastante satisfactorio. «Esperamos que no que queda de feira as vendas vaian a máis», añadió el edil.