«Triste y sola»

Moncho Núñez Centella

LA VOZ DE LA ESCUELA

Uno de los pintores que frecuentemente se asocia con la tristeza es Van Gogh, que vivió atormentado por su soledad. «Noche estrellada sobre el Ródano» (1888, Museo de Orsay, París)
Uno de los pintores que frecuentemente se asocia con la tristeza es Van Gogh, que vivió atormentado por su soledad. «Noche estrellada sobre el Ródano» (1888, Museo de Orsay, París)

21 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Sola se queda Fonseca, triste y llorosa queda la Universidad». Así cantaban (y cantan) las tunas, expresando el vacío que dejan en la ciudad compostelana los estudiantes que marchan al finalizar el curso. También se quedarán silenciosas y solas, tristes, las aulas de todos los demás centros docentes de Galicia. El bullicio propio de la gente joven es señal de vida y de alegría. Pero el curso termina, las aulas enmudecen y las tunas universitarias subrayan la tristeza de todas ellas, al cantarlas simbolizadas en el pazo de Fonseca. El nombre le viene del arzobispo Alonso de Fonseca y Ulloa, un hombre del Renacimiento nacido en la rúa del Franco, que en 1526 lograría del papa Clemente VII una bula para la creación de ese colegio que sirvió para articular la joven Universidad de Santiago. El final de las clases supone en muchos casos decir adiós; en primer lugar, a los compañeros, algunos de los cuales se han convertido en amigos y a quienes dudamos si acaso volveremos a ver. También se despide a la ciudad que se deja, y que entonces miramos de una manera especial. Recuerdo la noche que pude escuchar a una tuna portuguesa la entrañable Balada da despedida, un himno lleno de saudade donde se afirma que «Coimbra tem mais encanto na hora da despedida». Pues sí. Los hermanos del sur lo bordan en eso de poner dulzura triste en la canción. Pero hay un tema escocés que se ha hecho universal para el momento de la separación, con una antigua melodía que en español algunos conocen como Vals de las velas. Su título original es Auld Lang Syne, y se vincula a un poema escrito por Robert Burns en el siglo XVIII. Aunque ahora pueda tener lugar una despedida, volveremos a encontrarnos, y brindaremos por los viejos tiempos.

La universidad queda triste y llorosa. La canción que sirve de motivo habla también de que «las calles están mojadas y parece que llovió», pero aclara que son lágrimas de una niña (por entonces las tunas eran masculinas y los hombres todavía no lloraban). El llanto ayuda a eliminar la tristeza, que con toda seguridad estaría vinculada al amor. Tristeza y amor resultan inseparables, pero ambos sentimientos son ondulatorios y a veces se producen interferencias. Don Ramón de Campoamor lo formula muy bien. Con seguridad el amor es el ingrediente más común en los tiempos tristes de la gente joven y el causante de muchas lágrimas. Pero nuestra canción de hoy termina bien: a modo de consuelo, los tunantes rematan evocando la pálida luz de la luna y declarando un amor exclusivo. Ya hemos reunido a todos los socios de la tristeza: la separación y la despedida, el amor, la noche, y unas lágrimas. Por todo ello quise ilustrar este adjetivo con esa noche estrellada de Van Gogh, donde el agua del Ródano sustituye a las calles mojadas, al permitir que las luces se multipliquen, ilustrando la misma nocturnidad.

Van Gogh pintó ese cuadro, uno de sus preferidos, «en la noche misma, bajo una luz de gas», según le cuenta a su hermano Theo en una carta de septiembre de 1888. En ella le llama la atención sobre el cielo, donde quiso destacar las estrellas de la Osa Mayor, casi convertidas en margaritas y con una discreta tonalidad pálida «verde y rosa», muy distinta de la línea de luces amarillas del gas del alumbrado del puerto de Arlés, que se multiplican ondulantes en el agua del río. En esa carta, Vincent le destaca a su hermano que ha colocado «dos figuritas coloreadas de enamorados en primer término». No sabemos por qué, pero Van Gogh no representó para ello a dos jóvenes; si nos fijamos bien, los enamorados son dos ancianos, cogidos del brazo, ayudándose hasta el final. ¿Por qué habrá tantas citas sobre la tristeza de la vejez?

Palabras con historia

Todo en el amor es triste, mas, triste y todo, es lo mejor que existe

Ramón de Campoamor (1817-1911)

Lo más triste de la vejez es carecer de mañana

Santiago Ramón y Cajal (1852-1934)

Triste puedo estar solo; para estar alegre necesito compañía

Elbert Hubbard (1856-1915)

¡Triste época la nuestra! Es más fácil desintegrar un átomo que un prejuicio

Albert Einstein (1879-1955)

Nunca es triste la verdad, lo que no tiene es remedio

Joan Manuel Serrat (1943)

La vejez no es triste porque cesan nuestras alegrías, sino porque acaban nuestras esperanzas

Jean Paul Richter (1763-1825)

Nuestro amigo es aquel que nos asiste en los días tristes

Visnú Sharma (Panchatranta, siglo III antes de Cristo)

Hay algo más triste que envejecer, y es seguir siendo niño

Cesare Pavese (1908-1950)

actividades

1. La cita destacada es el comienzo de un poema del joven Pablo Neruda, de los que integran el poemario titulado: «20 poemas de amor y una canción desesperada». Averigua a cuáles de ellos corresponden los siguientes versos:

  • «Puedo escribir los versos más tristes esta noche. / Escribir, por ejemplo: «La noche está estrellada, / y tiritan, azules, los astros, a lo lejos»»
  • «Son más tristes los muelles cuando atraca la tarde»
  • «Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo»
  • «Inclinado en las tardes echo mis tristes redes / a ese mar que sacude tus ojos oceánicos»
  • «Antes que tú poblaron la soledad que ocupas, / y están acostumbradas más que tú a mi tristeza»

2. Haz una lista de canciones que representen algún tipo de despedida. Han de contener alguno de los siguientes términos: adiós, goodbye, ciao, bye, hasta siempre…

3. Escribe una carta de despedida a una persona a la que crees que no vas a volver a ver,

  • pero la aprecias mucho;
  • pero le debes un favor;
  • pero le hiciste daño.

4. El título original de este cuadro de Van Gogh es «À la porte de l’éternité» (en la puerta de la eternidad). En castellano suele citarse como «Anciano afligido». Indica todos los detalles que justifican tanto uno como otro de los títulos.

5. En estas vacaciones, haz visitas a personas mayores que vivan solas. Cuéntales tus cosas y pídeles que te cuenten las suyas, de cosas que había el siglo pasado y que ahora ya no hay.