Dolores Reig: «Apartar al niño de las redes sociales es absurdo, porque las va a necesitar»

La Voz

CARBALLO

La socióloga dará una charla en Santiago

12 may 2016 . Actualizado a las 12:33 h.

Hasta ahora se ha hablado mucho, y queda mucho por hablar, de los peligros de las redes sociales para los menores. Es, de hecho, un reto al que se enfrenta la sociedad, tanto en el ámbito social como educativo, policial y judicial. Pero es una realidad que no se puede obviar y de ese desafío se encarga -dentro del amplio campo que abarca su trabajo- Dolors Reig, psicóloga social y experta en educación en el campo de Internet, que este sábado impartirá en la Cidade da Cultura una charla dirigida a padres que forma parte del programa Rapaciñ@s, organizado por el Colexio Profesional de Enxeñería en Informática de Galicia con el apoyo de la Axencia para a Modernización Tecnolóxica de Galicia.

«Yo abordo la parte positiva de las redes sociales», subraya Reig para entrar en el meollo de la cuestión. Ella parte de la base de que hoy en día no se puede vivir de espaldas a Internet, ni siquiera los jóvenes pueden hacerlo. El reto, entonces, es enseñar a los padres y a los educadores a encauzar adecuadamente la cuestión. De entrada, «apartar al niño de las redes sociales es absurdo porque las va a necesitar». Y las necesita porque se lo impone su entorno, pero también porque cada día se hacen más imprescindibles en su educación. «Cada vez las escuelas se están valiendo más de los recursos que ofrece Internet y tienen plataformas para llevar a cabo trabajos on line. Cada vez más personas trabajamos con Internet y no estamos tonteando o chateando, sino que estamos estudiando y formándonos».

¿Cómo tienen que actuar entonces los padres ante esta nueva realidad? Ese es el gran reto al que se enfrentan hoy en día progenitores y educadores que no están acostumbrados a utilizar estas herramientas. «Muchas veces es un ámbito nuevo que no conocemos y que nos da mucho miedo.

Los padres que le tienen miedo a esta nueva realidad no le aportan a sus hijos valores ni conceptos éticos como sí hacen en otros campos, porque ni siquiera quieren hablar de eso, y si el niño tiene un problema, por ejemplo un caso de acoso, no se va a dirigir a sus padres y se siente desamparado, les falla ese referente. Entonces, si tiene un hermano mayor lo va a consultar con él, pero si no, se lo va a decir a sus amigos, que saben lo mismo que ellos. Son náufragos digitales, los llamamos así».

En sus charlas, Reig trata de dotar a los padres de herramientas para afrontar este problema.