El exceso de aforo causa al menos dos muertes en un concierto en Argentina

EFE

INTERNACIONAL

Había 400.000 personas en un recinto apto para 200.000 cuando sucedió la avalancha

13 mar 2017 . Actualizado a las 00:19 h.

Al menos dos personas murieron esta madrugada por una avalancha durante un concierto del cantante Indio Solari en la localidad argentina de Olavarría, aunque la cifra de fallecidos podría ser mayor, informaron este domingo medios locales.

El subsecretario de Salud de la localidad bonaerense, Germán Maroni, confirmó la muerte de dos jóvenes, uno por politraumatismos y otro de un paro cardiorrespiratorio, durante el concierto del icónico músico argentino. Los dos fallecidos son, al parecer, dos hombres adultos de unos cuarenta años y que no residen en Olvarría, la localidad que acogió el concierto, según fuentes de la Secretaría de Salud de ese municipio situado a 360 kilómetros al noreste de Buenos Aires. Las fuentes añadieron que hay una mujer en situación crítica con problemas cardiorespiratorios.

 Sin embargo, fuentes hospitalarias aseguraron al diario La Nación que los fallecidos podrían ascender a diez, siete de ellos menores de edad y tres adultos.

La avalancha se produjo durante el tercer tema interpretado por Solari, unos 20 minutos después del inicio, cuando el cantante detuvo la actuación para pedir a la gente que no pisase a una veintena de jóvenes que habían caído al suelo.

«Deben estar borrachos, no los pisen», dijo el músico, que, después de que se encendieran las luces y ante la magnitud de la tragedia pidió la presencia de miembros de la Defensa Civil, según testigos citados por los medios locales.

A partir de ese momento, se produjo un desfile incesante de ambulancias desde esa zona hacia las carpas de atención médica instaladas en el recinto. Unas 300.000 asistieron al concierto, aunque el lugar solo tenía capacidad para 250.000, según medios locales. 

La situación se desbordó al tirar bombas de palenque

La situación en el concierto se desbordó por el lanzamiento de bombas de palenque y pirotecnia, según testigos presenciales. Debido al descontrol y el estruendo entre el público, se produjeron avalanchas que provocaron que el propio cantante llamara la atención desde el escenario, a los 30 minutos de iniciado el show, sobre el desconcierto que se vislumbraba desde su posición.

La organización del evento, en la que participaron numerosos efectivos de seguridad privada, corrió a cargo del municipio de Olavarría y la productora musical de Indio Solari, cantante que, junto Skay Beilinson, lideró la banda rock and roll «Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota».

Tras las avalanchas, la incertidumbre se apoderó del lugar debido a los movimientos descontrolados de los asistentes y al colapso de las redes de telefonía móvil por la gran cantidad de usuarios de las mismas. Los testigos consultados señalaron la buena respuesta de los servicios de salud de Olavarría, que, además de la mujer en estado grave, atendieron a decenas de contusionados y heridos de carácter leve bajo la coordinación del secretario de salud del municipio.

Las puertas del recinto donde se celebró el concierto, cuyo terreno estaba en parte embarrado debido a las recientes lluvias, se abrieron media hora antes de lo previsto, para facilitar el acceso ante la gran cantidad de entradas vendidas.

Exceso de espectadores

La Fiscalía considera que las imágenes aéreas, obtenidas con drones, del macroconcierto de Indio Solari en el municipio de Olavarría (al noroeste de Buenos Aires), en el que murieron dos personas, indican que en el mismo pudo haber unos 400.000 espectadores. En declaraciones a la emisora Radio con Vos, la fiscal Susana Alonso confirmó que la investigación abierta para esclarecer las causas de los dos fallecimientos está en fase preliminar, pero la sensación que tiene es la de que «el lugar estaba preparado para menos cantidad de gente». Aseguró que los primeros cálculos indican que el recinto de Olavarría (centro de Argentina) estaba en condiciones de albergar «200.000 mil personas, a lo mejor», mientas que los cálculos, a partir de las imágenes registradas por las cámaras de los drones, «pueden superar los 400.000». «No sé si todos tenían entradas ni cuántas vendieron. Pero sí, por lo que me dicen los peritos, viendo los drones, una de las causas pudo haber sido esa», afirmó.