El centro francés une sus fuerzas a Macron

alexandra F. Coego PARÍS / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

GONZALO FUENTES | Reuters

Bayrou se retira de la carrera presidencial ante el riesgo de que la dispersión beneficie a Marine Le Pen

23 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Vuelco en la campaña electoral francesa que pone las cosas más difíciles a los candidatos de la derecha republicana y la ultraderecha populista, François Fillon y Marine Le Pen. Emmanuel Macron cuenta desde este miércoles con un apoyo crucial en su carrera al Elíseo: François Bayrou, presidente del partido centrista Movimiento Demócrata. El ex ministro de Educación ha decidido finalmente no presentarse a las presidenciales «en nombre de la coherencia» y aliarse con Macron, que por ahora se postula favorito para ganarlas.

Bayrou justificó su decisión afirmando que «el riesgo» de una derrota «es inmenso», especialmente después de conocerse que Le Pen ha recortado distancias en los sondeos. Hace dos semanas, el líder de ¡En Marcha! la superaba por 30 puntos, con el 65% de los votos frente al 35 % para el Frente Nacional. Las últimas encuestas apuntan, sin embargo, a que el duelo podría recrudecerse, con un 58 % para Macron y el 42 % para Le Pen. En cuanto a Fillon, ha recuperado un par de puntos pese a su escándalo de los empleos ficticios, llegando a amenazar el pase a la segunda vuelta de Macron. Según un estudio publicado ayer, Bayrou podría haber logrado un 6% de los votos en la primera vuelta, que ahora intentará desviar hacia el ex ministro rebelde de Hollande. 

La alianza no viene sin condiciones. El centrista le ha pedido «expresamente» que el programa «incluya una ley de moralización de la vida pública», es decir, relativa a la transparencia y a la lucha contra el fraude fiscal y la corrupción. Macron no ha tardado en aceptar la cláusula. Consciente de que el ex ministro de Economía es incapaz de desentenderse del decepcionante balance financiero del Gobierno de François Hollande, Bayrou también ha solicitado «un verdadero cambio de las prácticas y no tan solo un reciclaje de las antiguas prácticas». 

Bayrou fue ferozmente crítico con el candidato antes de prestarle su apoyo: lo acusó de venir «del mundo del dinero» y llegó a compararlo con el conservador Nicolás Sarkozy. Es precisamente esa posición la que los rivales de Macron han explotado para desdeñar la unión.Jean-Christophe Cambadélis, secretario general del Partido Socialista (PS), escribió en Twitter: «Bayrou estimaba que Macron era o un holograma o un hombre bajo la influencia del dinero y ¿ahora se le une?, ¡busquen el error!». En las filas de Benoît Hamon, la alianza ha sido vista como «un elemento de clarificación política». «Hasta ahora no se sabía si Emmanuel Macron era de izquierdas o de derechas», dijo en un programa de radio el portavoz del candidato del PS. «Pienso que ahora se dirige claramente hacia la derecha».

La policía estrecha el cerco sobre los empleos falsos en el Frente Nacional

Tras el registro de la sede del Frente Nacional el lunes, la policía puso este miércoles en detención a los dos ex colaboradores parlamentarios de Marine Le Pen, sospechosos de haber ocupado empleos ficticios. Se trata de su guardaespaldas, Thierry Légier, y de su íntima amiga y jefa de gabinete, Catherine Griset, ambos remunerados por el Parlamento europeo por unos servicios cuya existencia es puesta en duda por la policía. Los dos fueron recibidos en la oficina anticorrupción este miércoles por la mañana. Según informó la cadena de televisión BFMTV, Légier fue puesto en libertad durante el día, mientras que Griset fue interrogada por dos magistrados encargados del caso, que posteriormente la acusaron de delitos de encubrimiento y de abuso de confianza. La investigación judicial sospecha que el Frente Nacional ha cometido delitos de fraude organizado y creación de trabajos falsos. Le Pen ha desestimado los hechos, calificando la investigación de «conspiraciones políticas».