Un ministro promete la anexión de toda Cisjordania tras esta «dolorosa pérdida»
02 feb 2017 . Actualizado a las 07:55 h.Las fuerzas de seguridad de Israel afrontaron ayer una fuerte resistencia a la evacuación de la simbólica colonia judía de Amona, en Cisjordania, en cumplimiento de un fallo del Tribunal Supremo que dictaminó que era ilegal por estar construida en tierras de palestinos que poseen títulos de propiedad válidos para el Estado israelí. En compensación, el Gobierno de Benjamin Netanyahu anunció pocas horas antes la construcción de 3.000 nuevas viviendas en territorio palestino ocupado, en la cuarta medida de este tipo tras la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca. En doce días, se han proyectado más de 6.000 viviendas en Cisjordania y Jerusalén Este.
Unos doscientos manifestantes recibieron a pedradas a los policías en Amona, mientras otros se atrincheraron en varias casas, para evitar la evacuación de entre 200 y 300 residentes. Los enfrentamientos dejaron un balance de dieciséis agentes heridos y dos civiles, además de seis detenidos.
La colonia de Amona es un símbolo para los partidarios del Gran Israel, que incluye las tierras bíblicas de Samaria y Judea, la actual Cisjordania. Todo debido a que la orden del Supremo forzó al Gobierno a compensar a los colonos con nuevas casas y a buscar la aprobación de una ley favorable a la colonización. El ministro de Educación y líder de Hogar Judío, Naftali Bennett, calificó de «héroes» a los colonos de Amona y prometió la anexión de toda Cisjordania tras esta «dolorosa pérdida». De hecho, Bennet defendió ayer en la Kneset el proyecto de ley que legaliza la confiscación de tierras privadas palestinas. Amona fue construida en 1995 en la colina de Ofra, al norte de Ramala. En el 2006 ya hubo una primer evacuación violenta, que dejó numerosos heridos, por orden del Supremo. En diciembre del 2014, fue más allá y dictaminó eliminar por completo el asentamiento en el plazo de dos años. Ayer el mismo tribunal dio otro palo al Gobierno al revocar su plan para reubicar a los colonos evacuados en unas tierras aledañas a Amona.