Los combates continúan en Siria y ponen en peligro la tregua iniciada hace cuatro días
INTERNACIONAL
Al menos trece civiles y combatientes murieron durante las primeras 60 horas del alto el fuego, por diversas violaciones cometidas por ambos bandos
02 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Los combates entre las fuerzas del régimen y los rebeldes continuaban ayer en varios frentes en Siria, poniendo en peligro la iniciativa ruso-turca respaldada por la ONU para poner fin a casi seis años de guerra.
Desde la entrada en vigor del alto el fuego, el jueves a medianoche, la violencia cayó en intensidad, pero no cesó. Al menos trece civiles y combatientes murieron durante las primeras 60 horas del alto el fuego, por diversas violaciones cometidas por ambos bandos, informó ayer el Observatorio Sirio de Derechos Humanos. Los rebeldes acusan al régimen de haberla violado y amenazan con no respetar más la tregua. Este cese de las hostilidades, el enésimo después del comienzo de la guerra, puede abrir camino a las negociaciones de paz previstas para finales de enero en Kazajistán bajo la égida de Moscú y Teherán, padrinos del régimen, y Turquía, que apoya a los rebeldes.
En el frente norte, el Gobierno sirio lanzó en la mañana de ayer ataques aéreos sobre Atareb, en territorio rebelde cerca de Alepo, pocas horas después de la muerte de dos niños por disparos del ejército contra zonas rebeldes ubicadas al oeste de esta última ciudad, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
En total, cuatro civiles y nueve rebeldes perecieron desde el comienzo del cese el fuego, que excluye a los grupos yihadistas Estado Islámico y Fateh al Sham, precisó la ONG. «Se trata de violaciones» de la tregua, aunque «en lo inmediato no parece que puedan provocar su derrumbamiento», subrayó el director del OSDH, Rami Abdel Rahman.
El sábado de noche, los rebeldes dispararon una veintena de obuses contra las localidades progubernamentales de Fua y Kafraya, en la provincia de Idlib. En Tartús, controlada por el régimen, dos kamikazes hicieron explotar las cargas que llevaban adosadas a sus cinturones en una barrera militar matando a dos soldados, según el OSDH.