Cinco mil inmigrantes perdieron la vida este año en el Mediterráneo

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

INTERNACIONAL

ARIS MESSINIS | AFP

Los últimos han sido los cien inmigrantes desaparecidos el jueves al naufragar dos embarcaciones neumáticas a medio camino entre Libia e Italia

24 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Más de cinco mil personas perdieron la vida este año en el Mediterráneo cuando intentaban alcanzar Europa; los últimos han sido los cien inmigrantes desaparecidos el jueves al naufragar dos embarcaciones neumáticas a medio camino entre Libia e Italia, según denunció ayer Carlotta Sami, portavoz de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en el sur de Europa.

Según el testimonio de inmigrantes salvados por la Guardia Costera italiana, dos lanchas neumáticas abarrotadas de personas se hundieron el jueves. En una de las embarcaciones viajaban entre 120 y 140 personas, muchas de ellas mujeres y niños, y únicamente sobrevivieron 63. En la otra embarcación se encontraba una cifra similar de inmigrantes, ochenta de los cuales fueron rescatados por los agentes marítimos italianos.

La agencia de la ONU considera que esta nueva tragedia «evidencia que los Estados (europeos) deben urgentemente ampliar la posibilidad de admisión de los refugiados».

Este año ha sido, para ACNUR, el «peor de todos», con una media de 14 muertes por día, «el número más alto jamás registrado». La agencia denuncia que este «aumento alarmante de las muertes» parece estar vinculado a «la cada vez peor calidad de las embarcaciones utilizadas».

Italia, puente natural entre África y Europa, registra un elevado flujo migratorio procedente sobre todo de las costas de Libia. Este año ha sido «récord» en cuanto al desembarco de inmigrantes se refiere, al haberse registrado 179.525 llegadas. Esto implica un aumento del 19 % respecto al 2015 (150.841).

Solo en las costas de Libia murieron durante este año 2.600 personas al hundirse sus embarcaciones, de acuerdo con la oenegé Libya Body Count. Son unos sesenta más que los del año pasado.

Un nacimiento

La otra cara del drama la puso un bebé, una niña nacida a bordo de la fragata Navarra poco después de que su madre fuera rescatada del mar, junto con otras 216 personas que navegaban en una lancha neumática frente a Libia.

El portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, dio cuenta del hecho en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. «Fragata Navarra, barco español, suelo español. Bienvenida a España, niña. Creo que es un buen augurio para estas Navidades», resaltó el ministro. Pese a la cordial bienvenida, haber nacido en un barco español no confiere a la niña la nacionalidad española. Deberá someterse, como los otros rescatados, al procedimiento de acogida vigente en la UE.