Los nueve aspirantes tienen dos días para presentar las firmas necesarias para oficializar su candidatura
16 dic 2016 . Actualizado a las 07:43 h.Ayer se cerró el plazo para presentar candidaturas a las elecciones primarias de la izquierda francesa, organizadas por La Bella Alianza popular, una agrupación formada por el Partido Socialista (PSF) y otros tres partidos minoritarios. Los nueve candidatos tienen ahora dos días para presentar las firmas necesarias para oficializar su candidatura.
Manuel Valls es uno de los candidatos con más posibilidades de ganar. El ex primer ministro anunció su dimisión y su candidatura cuatro días después de que Hollande renunciase a participar. El político de origen español está convencido de que la izquierda puede vencer en las presidenciales de 2017. Su estrategia pasa por recuperar a los hollandistas decepcionados. Valls pretende continuar la bajada de impuestos a la clase media y popular y crear un «salario decente» de 800 euros para todos los franceses de más de 18 años con pocos recursos.
Su mayor rival es Arnaud Montebourg, también del PSF. El exministro de Economía ha presentado ya un primer borrador de programa, en el que marcó sus prioridades: la economía nacional y europea, la lucha contra el terrorismo, la Unión Europea, la reforma del sistema democrático francés y la transición a la ecología. Un sondeo del 8 de diciembre prevé una segunda vuelta muy ajustada con 51 % para Montebourg y 49 % para Valls; una diferencia que entra dentro del margen de error del estudio.
A las puertas de la segunda vuelta se quedaría Benoît Hamon (PSF). El exministro de Educación quiere «cambiar el modelo de desarrollo» y el democrático, con «menos diputados» y más control del Ejecutivo. Hamon está por ahora lejos del duelo Valls-Montebourg según las encuestas, pero cabe recordar que esta fue la posición de François Fillon, el actual candidato de la derecha, durante casi la totalidad de la campaña.
Entre los candidatos minoritarios se encuentra Jean-Luc Bennahmias, presidente del Frente Democrático. Propone la legalización de la marihuana, la creación de un salario mínimo universal y aumentar el presupuesto de la Unión Europea. François de Rugy, presidente del Partido Ecologista, busca que «la ecología esté en el corazón del proyecto de la izquierda» así como ligada a las «cuestiones económicas» y a la Unión Europea. La última en presentar su candidatura fue Sylvia Pinel, presidenta del Partido Radical de la Izquierda. Vincent Peillon, exministro de Educación, es el único candidato que ha defendido abiertamente la presidencia de Hollande. Los únicos candidatos sin carrera política son Gérard Filoche, inspector de trabajo, y Fabier Verdier, director de hospital.