Viena regala 100 euros a los jubilados para restar votos a la ultraderecha

patricia baelo BERLÍN / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

DOMINIC EBENBICHLER | Reuters

El candidato del partido xenófobo FPÖ parte con ventaja sobre su rival, el ecologista Alexander Van der Bellen

02 dic 2016 . Actualizado a las 07:41 h.

Los jubilados austríacos recibían ayer su primer regalo de las Navidades: una paga de 100 euros libres de impuestos, que se suma al aumento de las pensiones en un 0,8 % previsto para el 2017, tal como decidió la semana pasada el Ejecutivo de la gran coalición. Socialdemócratas y conservadores pretenden ganar así votos de cara a la segunda ronda de las elecciones presidenciales del domingo, en las que el candidato del partido xenófobo FPÖ, Norbert Hofer, parte con ventaja sobre su rival, el ecologista Alexander Van der Bellen. De cumplirse los pronósticos, Austria se convertiría en el primer país de la Unión Europea con un jefe de Estado ultraderechista. Un fenómeno que pronto podría extenderse como una epidemia por todo el continente, aupado por el rechazo de la población a la llegada de refugiados.

Consciente de que los comicios generan gran expectación en el extranjero, el Gobierno intenta hacer todo lo posible por restarle apoyos a los populistas. El canciller, el socialista Christian Kern, defendió el cheque de 100 euros como «un incentivo imprescindible para lograr un aumento del poder adquisitivo», que además repercutirá positivamente en las compras navideñas. Por su parte el ministro de Finanzas, el conservador Reinhold Mitterlehner, insiste en que la paga, que le va a costar a las arcas un total de 179 millones de euros, no va a suponer un lastre. Ambas formaciones tienen en los jubilados a un importante nicho de votantes. Sobre todo el Partido Socialdemócrata, que solo en Viena, el mayor estado federado del país, se juega hasta un tercio de los votos con los pensionistas.

Populismo

La oposición y las organizaciones económicas han criticado duramente la medida. El responsable de asuntos sociales del Partido Liberal Neos, Gerald Loacker, denunció la «falta de responsabilidad hacia las nuevas generaciones y el clientelismo que se fomenta con ello». «Se trata de populismo puro y duro a costa de todos», declaró en la misma línea la presidenta de la Confederación Industrias Juveniles, Therese Niss.