Corbyn se desmarca de los conservadores con una llamada a levantar los controles a la inmigración

rita álvarez tudela LONDRES / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

JON SUPER | Efe

Durante su discurso, el líder laborista  dejó claro que no sembrarán la división con «falsas promesas» como las que hacen desde filas conservadoras para lidiar con la negociación del «brexit»

29 sep 2016 . Actualizado a las 07:33 h.

El líder laborista, Jeremy Corbyn, tocó ayer de pasada y con pinzas un tema que levanta ampollas en el seno de su partido y también en la sociedad británica: la inmigración. La que fue la gran baza de los ganadores del brexit, el control de los flujos de entrada, fue rechazada por el izquierdista en la clausura de la conferencia anual de su partido, aún a sabiendas de que avivará aún más las diferencias internas.

Durante su discurso, que puso fin al cónclave celebrado en Liverpool, Corbyn dejó claro que no sembrarán la división con «falsas promesas» como las que hacen desde filas conservadoras para lidiar con la negociación del brexit. Sus breves palabras sobre el asunto tienen especial resonancia, pues el líder laborista no había hecho públicamente una defensa tan clara de la política migratoria y fue ampliamente criticado por su falta de implicación durante la campaña del referendo.

Por el contrario, algunos de sus críticos, compañeros del grupo parlamentario, piden a gritos reformas para frenar la llegada de extranjeros. Ayer, sin ir más lejos, horas antes de que Corbyn tomase el escenario, se produjo la dimisión del portavoz de la cartera de Interior, Andy Burnham, quien criticó a su jefe por ser parte de una élite, que no escucha las preocupaciones de los votantes ante una inmigración «ilimitada, no cualificada y sin financiación, que daña sus estándares de vida».

Sin embargo, para el diputado por la circunscripción londinense de Islington North desde 1983, la solución al descontento de la población británica que quiere frenar la entrada de inmigrantes pasa por tomar medidas para mejorar la situación de los servicios públicos. Entre sus propuestas, está mejorar el sistema sanitario, el acceso a la vivienda y la educación, que considera están exacerbados por los flujos migratorios.

Para Corbyn, está claro que los inmigrantes no hacen bajar los salarios. Esto se debe, en su opinión, a «los empresarios explotadores y los políticos que desregulan el mercado de trabajo y destrozan los derechos sindicales». Con esta defensa, no es de extrañar que los sindicatos sean su principal apoyo para este segundo mandato, que comenzó el sábado tras imponerse con un 62 % de los votos frente al otro candidato, Owen Smith.

Corbyn hizo una llamada a la unión para frenar a los conservadores y para que los votantes los vean como un partido ganador. Con la mirada puesta en que haya elecciones generales anticipadas en 2017, recalcó que están listos para «el desafío», pero pidió a los parlamentarios que pongan «fin a la guerra de trincheras».