Una ocasión perdida para movilizar el voto de los republicanos

Adriana REY NUEVA YORK / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

Saúco Fernández

La campaña de Donald Trump intenta minimizar el retroceso de su candidato en el primer debate cara a cara con Clinton

28 sep 2016 . Actualizado a las 10:17 h.

Tensa calma en el Partido Republicano. A Donald Trump le bastaba con empatar, no tenía ni siquiera que ganar a Hillary Clinton, ya que solo debía mostrar que era presidenciable. Por eso, hay cierto regusto en sus filas. «Los debates no son tan importantes», decía Kellyanne Conway, jefa de campaña de Trump en un intento de minimizar el paso atrás. La campaña republicana intenta sobreponerse y analiza los puntos fuertes de Clinton para tratar de derribarlos el próximo 9 de octubre en Sant Louis, Misuri. Sin embargo, saben que con este primer debate pueden haber perdido una gran oportunidad en lo que a movilización del voto se refiere.

Durante el debate, la tercera búsqueda en Google fue «registrarse para votar», en español, con más de 100.000 pesquisas y con especial interés en Florida. Un estado clave en las elecciones, con una fuerte presencia hispana: el 11,9 % del total del padrón son latinos.

Los indecisos

¿Significa esto que el debate ha servido para que se decanten los indecisos? Por supuesto que sí. Otra cosa diferente es que el encuentro haya cambiado la intención de voto en encuestas fijas. Encuestas que no hay que olvidar siguen rozando el empate entre los dos candidatos y en las que Donald Trump ha subido como la espuma, tras un evidente desplome de Clinton, que llegó a tener hasta quince puntos de ventaja el pasado mes de agosto: «Habrá alguna diferencia, pero somos nosotros quienes debemos sostener nuestro discurso todos los días», decía el candidato demócrata a vicepresidente, Tim Kaine, minimizando las consecuencias del duelo.

Sea como fuere, lo que es cierto es que tras este debate sí hay un antes y un después en cuanto al ánimo de los candidatos.

En el caso de Hillary Clinton, continuó ayer sus mítines por Carolina del Norte y Florida. Lo hizo mucho más fuerte, sonriente y confiada. Ahora bien, a partir de este momento los asesores deben prepararla para una lucha sin cuartel en el segundo encuentro contra el magnate.

Buscando culpables

Trump, que estuvo en cambio a la defensiva, apuntó a varios culpables de sus fallos en el debate: desde el moderador, Lester Holt, a un micrófono supuestamente defectuoso. Su primera parada será Florida, para luego viajar a Iowa, sabiendo eso sí, que todavía no ha perdido la oportunidad de cambiar la dinámica de la carrera. «En el primer debate de hace cuatro años entre el presidente Obama y Mitt Romney, Obama se vio apático y desenfocado, mientras que Romney se mostró enérgico y terminó ganando el duelo. Una vez más el favorito demostraba lo fácil que es derrumbarse. Si no se hubiera recuperado en el segundo debate, Obama podría haber tenido serios problemas para ser reelegido», recuerda David Gergen en CNN. Ambos bandos preparan ya las próximas estrategias, donde a buen seguro, tendrán peso temas como el atentado de Bengasi o el muro con México, los grandes olvidados en la Universidad de Hofstra.