«Erdogan va hacia la autocracia»

laura fernández palomo ESTAMBUL / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

Laura Fernandez Palomo

«Desde las mezquitas llaman a la gente a las calles para que apoyen al Gobierno. Mete miedo»

28 jul 2016 . Actualizado a las 08:39 h.

Por su apego con Galicia, a la que denomina «mi paraíso», tradujo del gallego los poemas de Rosalía de Castro para revistas literarias de Turquía. Irfan Guler, un kurdo-turco residente en el lado asiático de Estambul, evita desde hace tiempo las zonas concurridas de la ciudad por el deterioro en la seguridad que vive el país. El último susto, la noche del 15 de julio con la intentona del golpe de Estado, que lo mantuvo en vilo toda la noche. Abogado de profesión y doctorando en la Universidad de Santiago sobre nacionalismos, cree que su país se encuentra en un momento crucial que puede devenir en autocracia.

-¿Ha cambiado el día a día después de la intentona golpista?

-Lo diferente es la presencia de gente en las calles en apoyo al Gobierno. Los llaman desde las mezquitas. Nunca hemos visto algo así en Turquía, la religión interfiriendo en la política. Ahora lo hacen abiertamente, aunque es ilegal, y es muy peligroso. Esto sí que mete miedo.

-Se ha imputado la autoría del golpe a los gulenistas [partidarios del clérigo Fethullah Gulen], que han sufrido miles de detenciones.

-No creo que todos estén involucrados directa o indirectamente. Apoyar un movimiento no quiere decir que seas golpista, pero el enfrentamiento entre Erdogan y los gulenistas viene de hace tiempo y tenían preparadas listas de personas afines. El golpe les ha dado una oportunidad para removerlos a todos. No es legal ni justificable. Hay un golpe de Estado por un lado y, por otro, Erdogan que hace tiempo va hacia la autocracia.

-¿Ha salido reforzado el presidente? 

-Si convocaran elecciones ahora, creo que ganaría por mayoría absoluta. Está claro que tiene un objetivo muy claro: cambiar la Constitución para instaurar un sistema presidencialista. Su fin último es continuar en el poder. 

-¿Qué representación tenían los gulenistas?

-No tienen una base social, pero han construido una red al acceder a las instituciones del Estado. Becan a niños brillantes sin recursos, los educan y luego los van colocando en la administración y así garantizan su compromiso. Erdogan llegó al poder gracias a ellos, hasta que, en un punto, se hizo con todo el control.

-¿Cuándo comienza esta deriva autoritaria?

-Creo que Erdogan hizo buenas cosas en favor de la democracia, de la economía, y ante la situación kurda, con el inicio del proceso de paz que ahora ha fracasado. Probablemente lo hizo para intentar entrar en Europa, pero todo eso cambió en 2010 y, mucho más, tras las revueltas de Gezi del 2013.

- ¿Retrocedió el sentimiento europeísta en el país?

-Puse muchas ilusiones en esta integración, pero a la Unión Europea no le preocupa que haya democracia en Turquía, sino que no dejemos pasar a los refugiados. Pedimos por primera vez la adhesión en 1959 y no hay otro país que lo haya intentado tantas veces. La gente está decepcionada y el sentimiento europeísta se encuentra por los suelos. Nos sentimos engañados.

«En Diyarbakir saben de Galicia»

Desde que Irfan Guler llevara a un grupo de jóvenes gallegos a bailar a la región kurda de Diyarbakir y tradujera los relatos del escritor gallego Séchu Sende, en el sureste de Turquía saben de Galicia. En esta zona y su comunidad, concentra su preocupación tras el golpe de estado que «afectará seguro a la relación del nacionalismo kurdo y el Gobierno», aunque por el momento no se sabe cómo. «De momento, nadie tiene un plan para resolver este problema», se lamenta Guler. Califica de error la ausencia del pro kurdo HDP (Partido Democrático de Los Pueblos) en la reunión entre Erdogan y los partidos opositores. «No fueron invitados», valora negativamente, «y así no se puede iniciar el proceso de reconciliación que necesita el país».

Opuesto a la tentativa golpista y a cualquier forma de violencia, este abogado que comenzó a ejercer en organizaciones de derechos humanos de la minoría kurda reprocha al PKK su vuelta a las armas y al HDP no haber mantenido el proceso de paz con el Ejecutivo, que saltó por los aires en julio de 2015.