La policía investiga si el autor del tiroteo de Múnich citó por Facebook a conocidos

Efe BERLÍN

INTERNACIONAL

Agencias

Apuntan a un posible caso de locura y reiteran que se trataba de un joven germano iraní de 18 años, que creció en Múnich

23 jul 2016 . Actualizado a las 19:52 h.

La policía de Múnich no ha encontrado nada que relacione al responsable del tiroteo y la matanza de Munich de ayer viernes, que costó la vida a nueve personas, con el Estado Islámico (EI), tras registrar su vivienda. Los investigadores sí que consideran que existe un vínculo «evidente» entre el tiroteo y el asesino supremacista noruego Anders Behring Breivik.

La policía, que apunta a un posible caso de locura, reiteró que se trataba de un joven germano iraní de 18 años, que creció en Múnich. El joven, según las primeras investigaciones, había padecido algún tipo de transtorno depresivo. 

La policía alemana informó de que investiga una cuenta de Facebook a través de la cual el tirador de Múnich pudo haber invitado a algunos conocidos a acercarse a la hamburguesería en la que comenzó el ataque. 

Tras el tiroteo, el joven, sin antecedente policiales, se alejó del centro comercial y se suicidó con la misma pistola que había utilizado, una nueve milímetros adquirida de forma ilegal, ya que tiene la numeración borrada. En la mochila que llevaba la policía encontró cargadores con 300 balas. El autor de la matanza se suicidó de un disparo en la cabeza ante la policía, después de que en la tarde del viernes, hacia las 18.30, una patrulla de la policía entrase en contacto con el atacante. Al ser interpelado por los agentes sacó su pistola, apuntó a su cabeza y disparó, indica la Policía, a través de un comunicado.

Cuando eso ocurrió, el atacante estaba a cierta distancia del centro comercial, donde se había producido el tiroteo unas dos horas y media antes. Agentes de civil habían disparado ya anteriormente contra el joven, en el aparcamiento del centro comercial, pero resultó ileso y logró huir.

Entre las víctimas mortales, la mayoría eran menores de edad. Y es que entre los fallecidos hay tres adolescentes de 14 años, dos de 15 y uno de 17. Las otras tres víctimas tenían 19, 20 y 45 años de edad. De los fallecidos, tres era jóvenes albaneses de Kosovo. 

Interés por matanzas

«No hemos encontrado nada que haga pensar que el atacante tuviera que ver algo con Estado Islámico», dijo el responsable de la policía de Múnich, Hubertus Andrä. Sin embargo, la policía halló indicios que apuntarían que el joven sentía fascinación por los asesinatos en masa y que recopilaba información sobre «cuestiones vinculadas con desequilibrados» autores de matanzas, como libros y artículos de diarios, precisó Andrä. Se encontraron, entre otras cosas, muchos artículos sobre acciones policiales y un libro titulado Amok, por qué matan los estudiantes.

En este sentido, los investigadores dijeron que existía un vínculo «evidente» entre este tiroteo y el asesino supremacista noruego Anders Behring Breivik, anunció el jefe de la policía. Precisamente este viernes se cumplían cinco años de la masacre de 77 personas cometidas por el ultraderechista noruego en la isla de Utøya, en Noruega, durante una concentración de jóvenes laboristas.

Asimismo, la policía reiteró que lo ocurrido no tiene nada que ver con los refugiados. «Ni el ataque ni el atacante tienen relación alguna con el tema de los refugiados», dijo Andrä. Andrá dijo además que no hay indicios de que el atacante tuviera cómplices y que de momento no hay ninguna razón para no moverse con normalidad en Múnich.