El presidente francés rechaza mantener negociaciones con el Reino Unido mientras Londres no active la ruptura con la Unión
22 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.En apariencia, no hubo discrepancias de fondo, sino tan solo de matiz, entre el presidente francés y la canciller alemana tras las reuniones que ambos mantuvieron con la primera ministra británica, Theresa May. François Hollande se mostró de acuerdo con Angela Merkel en dar tiempo al Reino Unido para separarse de la Unión Europea (UE) pero, este es el matiz, le pidió que no se eternice. «Cuanto antes sea, mejor», dijo.
Los británicos «necesitan tiempo» para invocar el artículo 50 del Tratado de Lisboa y preparar las negociaciones que a partir de ese momento se entablarán con la UE con un plazo máximo de dos años, dijo el presidente francés, quien, sin embargo, no dejó de mostrar su esperanza en que el proceso se cierre lo más rápidamente posible. «Hay que reducir el máximo la incertidumbre» que acompaña al brexit, señaló tras entrevistarse durante una hora con la primera ministra británica. «No puede haber conversaciones, prenegociaciones antes de la negociación, pero sí puede haber una preparación. Repito que cuanto antes sea, mejor, en el interés de Europa, del Reino Unido y de nuestras economías respectivas», agregó.
En una intervención cordial, según Efe, llena de complicidades con la antigua ministra británica del Interior, Hollande fue sin embargo tajante en sus afirmaciones, al instar al Reino Unido a elegir entre «quedarse en el mercado único y aceptar la libre circulación o tener otro estatus». Hollande, que por la mañana había estado en Irlanda para apremiar a los británicos a no dormirse en los laureles, consideró este asunto el «mayor punto crucial», pues Francia ya ha expresado en numerosas ocasiones que no aceptará un acuerdo «a la carta» con el Reino Unido que le permita solo beneficiarse de las ventajas financieras de su asociación.
May no varió en París el guion que defendió en Berlín. Tiene el propósito de no invocar el artículo 50 del Tratado antes de fin de año. Aseguró que su país «puede aprovechar los próximos seis meses para preparar las conversaciones en una forma constructiva para optimizar al máximo las relaciones entre el Reino Unido y la UE». May y Hollande coincidieron, pese a ello, en la importancia de que se mantengan los vínculos entre sus países en diferentes materias como la seguridad y la defensa. En este sentido, acordaron que el acuerdo de Touquet, suscrito en 2010 y por el que Francia ejerce en Calais el control fronterizo sobre aquellos inmigrantes que quieren pasar a la isla de forma clandestina, permanecerá inalterado.
Por teléfono con Rajoy
Una cosa es perder dos días para cursar visitas a Berlín y París y otra bien distinta, debe de pensar May, desperdiciar el tiempo en Madrid. Mientras escenificaba la bilateralidad con Hollande y Merkel sobre el terreno, May se conformó con llamar por teléfono al presidente en funciones, Mariano Rajoy, pese a que también tiene temas importantes que tratar con España. Según fuentes del Gobierno que cita Efe, ambos han convenido en que ningún ciudadano español o del Reino Unido salga perjudicado por el brexit. La conversación tuvo un tono cordial y constructivo. Por tanto, nada de cuestiones espinosas como Gibraltar.