Macri vincula el pago de pensiones al resultado de una amnistía fiscal

marcela valente BUENOS AIRES / COLPISA

INTERNACIONAL

EITAN ABRAMOVICH | AFP

Intenta repatriar parte de los 360.000 millones que Argentina tiene en el exterior

28 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Necesitado de difundir buenas noticias, el presidente de Argentina, Mauricio Macri, anunció ayer la cancelación de una deuda con el 30% de los jubilados. Si bien no dio detalles, el pago está condicionado al éxito de un proyecto de ley de repatriación de capitales no declarados al fisco de argentinos en el exterior a los que se busca atraer. El anuncio fue realizado en un centro de jubilados de Buenos Aires, donde se prepararon tribunas alrededor de un escenario en el cual el presidente habló al estilo de un talk show.

Primero hicieron uso de la palabra los jubilados, que contaron al público sus penurias para cobrar las deudas. Luego Macri dijo que la amnistía fiscal, que se someterá al Congreso, permitirá terminar «con décadas de atropellos y estafas», aludiendo a los pensionistas que mantienen pleitos con el Estado por jubilaciones mal liquidadas y que esperan durante años una sentencia.

El presidente explicó que para poder pagarles «queremos cobrarle un impuesto a los que más tienen y a los que han evadido». Ese tributo sería de entre el 10 y 15% sobre los capitales que vuelvan al país. La iniciativa, a la que el Gobierno llamó «reparación histórica», tiene previsto que los 2,5 millones de jubilados que perciben pensiones más altas, aunque no todo lo que en realidad les corresponde, empiecen a cobrar paulatinamente lo que se les debe. El Ejecutivo fraccionará el pago de la deuda en varias cuotas en lugar de abonarlo en un único ingreso.

Los funcionarios encargados de la Seguridad Social explicaron que el proyecto también establece una jubilación universal para los mayores de 65 años que no hayan realizado las aportaciones necesarias para cobrar un subsidio, lo que les permitirá percibir el 80% del valor de la pensión mínima. Respecto al blanqueo de divisas, calificado por Macri como «sinceramiento fiscal», el Gobierno calcula que podrá recuperar «una porción» de los 360.000 millones de euros que los argentinos atesoran fuera del país. «Hay miles de millones que están en el exterior, que se los llevaron porque no confiaron en el Estado», justificó el mandatario.

Macri lanzó su propuesta de amnistía fiscal un día después de que se conociera su primera declaración jurada de bienes como presidente, en la que admitió tener el equivalente a 1,2 millones de euros en Bahamas. Sin embargo, pidió a sus compatriotas que declaren en Argentina el dinero que tienen en el exterior. «Necesitamos que nos acompañen, que sean parte de esta nueva etapa», exhortó. La declaración jurada de Macri ante la Oficina Anticorrupción causó un gran impacto en la opinión pública al contradecirse con las presentadas anteriormente. El nuevo documento no solo recoge el doble de patrimonio y cuatro nuevas propiedades adquiridas en 2015 que no constaban en la primera declaración sino que desaparecen las cuentas en EE.UU. y Suiza y aparece una nueva en el paraíso fiscal de Bahamas.