España desplaza a Venezuela como segundo socio comercial de Cuba

Pedro García Otero CARACAS / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

GUILLERMO LEGARIA | AFP

Cuba ha comenzado a diversificar sus relaciones económicas con diversos países, entre los que se encuentran Brasil, Australia, España y sobre todo Estados Unidos

21 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La caída del precio del petróleo, principal producto de intercambio entre Cuba y Venezuela, sumada a la aguda crisis económica, está reduciendo la importancia de este último país como salvavidas financiero del régimen de los Castro, aunque, en medio de las turbulentas aguas venezolanas, y entre críticas crecientes de la oposición, sigue subsidiando (prácticamente regalando, según los críticos) unos 100.000 barriles diarios de petróleo que han permitido a La Habana convertirse en exportadora de hidrocarburos.

Cuba ha comenzado a diversificar sus relaciones económicas con diversos países, entre los que se encuentran Brasil, Australia, España y particularmente con Estados Unidos, a partir de la histórica reapertura de relaciones. Jorge Duany, director del Instituto de Investigaciones Cubanas de la Universidad de La Florida, cree que el acercamiento de Raúl Castro a EE.UU. obedece, precisamente, al continuo deterioro económico y político de Venezuela.

En este escenario, España ha conseguido desplazar a Venezuela como segundo socio comercial de Cuba, por detrás de China, según cálculos del secretario de Estado de Comercio, Jaime García Legaz. España ha logrado reactivar con Cuba «una relación que estaba muy ralentizada» y que ya al cierre del 2015 representó un intercambio superior a los 1.000 millones de euros, con tasas de crecimiento del 15 % anual, afirmó el alto cargo español, que participa, junto con Rodrigo Malmierca, ministro de Inversión Extranjera de la isla, en el XXI Comité Empresarial Hispano-Cubano, organizado por las cámaras de comercio de ambos países.

García Legaz, según información de los medios oficiales cubanos, puso en marcha con Malmierca un comité binacional para definir los proyectos de inversión que se llevarán a cabo en la isla dentro del programa recientemente acordado para reestructurar 400 millones de euros de deuda. La deuda de Cuba con España, impagada en su totalidad, ascendía el año pasado a 2.400 millones de euros.

El ministro cubano resaltó que La Habana no olvidará a las empresas españolas que apoyaron y se mantuvieron en la isla en los duros momentos de la crisis económica que sufrió el país tras el desplome del bloque soviético.