El acuerdo de verdad y justicia crea un sistema para resarcir a las víctimas y establece la amnistía de los excombatientes
16 dic 2015 . Actualizado a las 05:00 h.El Gobierno de Juan Manuel Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) dieron ayer un paso de gigante que acerca la paz al país sudamericano al rubricar un importante acuerdo sobre las víctimas del conflicto. El acto se realizó con la presencia de 10 representantes de la guerrilla que durante 60 años azotó el país.
«En cumplimiento de nuestro compromiso de poner a las víctimas en el centro del acuerdo, el Gobierno nacional y las FARC acordamos crear el sistema integral de verdad, justicia, reparación y no repetición» de la violencia, afirma la declaración conjunta leída por los representantes de los países garantes, Noruega y Cuba. El acuerdo, de 60 páginas, es el colofón de año y medio de discusiones y establece la «creación de un sistema integral» para esclarecer la verdad, el «resarcimiento de las víctimas», un sistema de justicia que otorga amnistía para los excombatientes que no estén implicados en delitos atroces (secuestro, violencia sexual y ejecuciones fuera de combate) y solo estén acusados de levantarse en armas contra el Estado. También establece que quienes acepten sus ofensas, siempre que no sean tipificadas como genocidio, reciban penas de entre 5 a 8 años.
Con la firma del acuerdo, considerado por ambas partes el más complicado de la negociación, son ya cuatro los aspectos acordados: sobre la política de desarrollo agrario, la futura participación política de la guerrilla y la lucha contra el narcotráfico. Falta por acordar el del fin del conflicto, que incluye lo relativo al cese el fuego bilateral y la entrega de armas, y un sexto aspecto relativo a la verificación del cumplimiento de lo pactado.
En el Salón de Protocolo del Laguito, donde se realizaron los encuentros previos, se reunió una amplia delegación gubernamental y guerrillera, así como garantes y países acompañantes (Venezuela y Chile) y los representantes de los cinco grupos de víctimas que viajaron a Cuba para plantear cara a cara sus testimonios. Los miembros de este colectivo han advertido que si el Gobierno y las FARC «fallan» al cumplir el pacto, «fallarán a Colombia».
La periodista Jineth Bedoya, que fue secuestrada por paramilitares y que ha ejercido las funciones de portavoz de la delegación, explicó que su plácet «ni significa que hayan renunciado a la justicia, la verdad y la reparación», sino que «solo por el camino del diálogo se podrá llegar a la paz». «Como sobrevivientes estamos creyendo en ustedes y queremos que el país crea en el acuerdo», destacó.