La nueva ayuda se hará efectiva cuando, previsiblemente, lo apruebe Bruselas el viernes
18 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.El Gobierno de Alexis Tsipras aceptó nuevos recortes a cambio de un nuevo tramo del rescate económico. El Ejecutivo heleno aceptó 48 requisitos impuestos por la cuadriga de acreedores (Comisión Europea, Mecanismo Europeo de Estabilidad, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional) a cambio de 12.000 millones de euros, de los cuales 10.000 serán para recapitalizar la banca griega. El nuevo tramo del rescate se hará efectivo cuando, previsiblemente, lo apruebe Bruselas el viernes.
Grecia y los representantes de la denominada cuadriga cerraron en cambio uno de los temas socialmente más sensibles, el de las ejecuciones hipotecarias. El Gobierno de Tsipras tuvo que ceder en uno de los temas socialmente más sensibles, el de los desahucios por ejecuciones hipotecarias. Era una de sus principales promesas electorales, y el primer ministro tuvo que hacer a la cuadriga más concesiones que las pactadas por la coalición dirigida por Andonis Samarás. Los desahucios serán posibles en Grecia, después de una moratoria de cinco años, aunque bajo unas condiciones que protegerán el 60 % de las hipotecas, cuando el objetivo de Tsipras era blindar el 72 %. Así, solo quedarán absolutamente protegidos los propietarios de viviendas con ingresos muy bajos, que constituyen en torno al 25 % de la cartera de hipotecas morosas. Para subsidiar a quien el valor catastral de su vivienda no excede de 170.000 euros, se reservarán 100 millones de euros en los presupuestos del 2018.
El Gobierno ha cedido mucho terreno también en la cuestión de los créditos morosos de la banca, al aceptar que se puedan vender a fondos de inversión extranjeros, los llamados fondos buitre. Aunque aún quedan pendientes de discutir algunos aspectos de esta caliente cuestión que se abordarán durante diciembre.
Un nuevo impuesto sobre el vino, que se sumará al de los juegos de azar, evitará tasar un IVA del 23 % a la educación privada.
Las oposición no tardó en criticar los nuevos ajustes. En un comunicado, los conservadores de Nueva Democracia recordaron que en enero, antes de las elecciones, Tsipras aseguró que «ni una sola casa pasaría a manos de los bancos».
Grecia y los acreedores ya están trabajando en la próxima lista de requisitos, para obtener otros 1.000 millones de euros del rescate total de 86.000.