El senador hispano se impuso en el debate republicano a un Jeb Bush que no acaba de despegar y al ultraconservador Ted Cruz
30 oct 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Los diez candidatos republicanos que encabezan las encuestas volvieron al plató por tercera vez la noche del miércoles. Del agrio debate que protagonizaron, los que mejor saldo obtuvieron fueron los dos hispanos: Marco Rubio, que fue el claro vencedor, y Ted Cruz, que se destacó muy por delante de los otros como líder de los ultraconservadores.
Este debate también ha servido para ir poniendo las cosas en su sitio. Donald Trump, que hasta hace una semana encabezaba las encuestas, se limitó a repetir el número con el que venció en el primero. Pero ya no le funciona. El interés de los votantes por él decae a la misma velocidad que el espacio que ocupan sus declaraciones estrambóticas en los medios.
Ben Carson, el neurocirujano retirado que, como Trump y Carly Fiorina, se estrena en política, es el actual líder de las encuestas, aunque los analistas creen que no por mucho tiempo. El debate mostró por qué: aunque es tranquilo y cae bien, patinó cuando le pidieron que explicara su plan fiscal.
La vencedora del segundo debate, Fiorina, no ha sabido o no ha podido rentabilizar aquella victoria. Su posición en las encuestas sigue estando abajo y el último debate no la ayudará a escalar, como tampoco al resto de los candidatos que van a la cola.
Entre los políticos profesionales, la atención estaba puesta en Jeb Bush y Marco Rubio. El segundo obtuvo una rotunda victoria a costa del fracaso, igual de rotundo, del primero. La campaña de Bush no acababa de despegar a pesar de que partió como claro favorito y las cosas se le han puesto todavía peor después del miércoles. Intentó atacar a Rubio, que fue su protegido en Florida, pero el joven senador hispano se defendió de forma magnífica y dejó claro que es un digno rival para Hillary Clinton.
Y, si hasta hace poco tiempo se pensaba que el demonio de Clinton el año próximo sería el pequeño de los Bush, los rumores dicen que los responsables de la campaña de la exsecretaria de Estado a quien temen de verdad es a Rubio.
El relevo de Boehner
La Cámara de Representantes eligió ayer a Paul Ryan como presidente en sustitución de John Boehner, que dimitió hace un mes. El nuevo hombre fuerte de los republicanos fue candidato a la vicepresidencia, junto a Mitt Romney, en el 2012.