La canciller alemana acudió a inaugurar un festival sobre Wagner en la ciudad de Bayreuth
26 jul 2015 . Actualizado a las 15:15 h.La canciller alemana, Angela Merkel, cayó al suelo en un entreacto de la ópera Tristán e Isolda, que inauguró el Festival Richard Wagner de Bayreuth (Baviera), al romperse la silla en la que iba a sentarse y no por un desvanecimiento, como había informado el diario Bild. El popular periódico, que difundió como otros medios locales el presunto mareo de la canciller, aclaró en su edición digital el malentendido y explicó que todo se debió a la mala suerte.
El incidente ocurrió en presencia del presidente del Parlamento, Norbert Lammert, y la ministra de Cultura, Monika Grütters, con quien la canciller compartía mesa en ese entreacto. Bild argumentaba la hipótesis del desmayo al recordar que en diciembre del 2014 ocurrió algo parecido, al sentirse Merkel descompuesta durante una entrevista con la televisión pública, que reanudó tras un breve descanso.
Merkel, fanática de Wagner, acudió de acuerdo a su costumbre a la apertura del citado festival operístico, donde la biznieta del compositor, Katharina, dirigió la nueva producción de Tristán e Isolda, con Christian Tielemann a la batuta. La canciller entró acompañada de su esposo, el catedrático Joachim Sauer, luciendo un traje azul turquesa y saludando a los centenares curiosos que aguardaban a la entrada de visible buen humor.
En una recepción al término de la gala, Merkel mostró su agrado por la producción dirigida por Katharina Wagner.