Diez años de los atentados de Londres

Agencias LONDRES

INTERNACIONAL

El 7 de julio de 2005 el mundo centraba su atención en la capital inglesa, diez años más tarde nadie ha olvidado el estremecedor suceso 

07 jul 2015 . Actualizado a las 22:57 h.

El 7 de julio de 2005 cuatro atacantes suicidas originarios de Pakistán atacaron tres vagones del metro y un autobús de dos pisos en la plaza Tavistock, cerca del Museo Británico, en hora punta, dejando 52 víctimas mortales y 700 heridos. Las bombas explotaron en hora punta, justo cuando Blair se reunía con el entonces presidente de EEUU, George W. Bush, en Escocia, durante la cumbre del entonces Grupo de los Ocho.

Hoy, el primer ministro británico, David Cameron, encabezó el funeral en recuerdo de las víctimas de los atentados terroristas que sacudieron Londres hace diez años. «Hoy el país se une para recordar a las víctimas de una de las atrocidades terroristas más sangrientas en tierra firme británica», dijo Cameron antes de acudir a la ceremonia en el monumento 7/7 en Hyde Park. El monumento consiste en 52 sencillos pilares de acero, que representan a cada una de las víctimas mortales, en los que están grabados sus nombres y la hora en que se produjo la explosión en la que perdieron la vida.

Cameron también mencionó el ataque terrorista contra turistas en Susa, en Túnez, el pasado 26 de junio, en el que 30 de las 38 víctimas eran británicos, fue un recordatorio de que «la amenaza del terrorismo sigue siendo tan real como mortal». Sin embargo,  «nunca nos dejaremos intimidar por el terrorismo. Seguiremos haciendo todo lo que podamos para mantener la seguridad pública en Reino Unido, proteger a las mentes jóvenes vulnerables de las creencias extremistas y promover los valores compartidos de tolerancia, amor y respeto que hacen tan grande a Reino Unido», añadió el primer ministro.

Cameron, el alcalde Boris Johnson, el príncipe Guillermo y el comisario de la policía metropolitana, Bernard Hogan-Howe, depositaron coronas de flores en el monumento levantado para recordar a las víctimas en Hyde Park. Los terroristas no lograron su objetivo, dijo Johnson poco antes. «Creo que la mayoría de la gente diría que Londres es aún más abierto al mundo e incluso más hospitalario», añadió.

Por su parte, Hogan-Howe llamó a «reflexionar sobre nuestra ciudad, lo fuerte que nos unimos para levantarnos contra la amenaza que enfrentamos y enviar un mensaje a los terroristas de que Londres fue y sigue siendo fuerte, estando unido y vibrando».

También las estaciones afectadas hace diez años, en el torneo de Wimbledon o ante la catedral de Saint Paul, se observó respetuosamente el momento en recuerdo de las víctimas. En el interior del gran templo londinense, se celebró un funeral conmemorativo al que asistieron familiares de las víctimas, sobrevivientes y autoridades. «Ayudé en los momentos posteriores y me está resultando duro», dijo conteniendo las lágrimas Mark, un conductor de metro, en la estación de King's Cross. «Lo que vi no quiero volverlo a ver. Fue horroroso», concluyó.

El país guardará un minuto de silencio a las 22.30h GMT (00.30h hora española), después de haber hecho el mismo gesto el pasado viernes en honor de los muertos de Túnez.