Finge su secuestro para recuperar a su exnovia

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Dispositivo para encontrar al israelí que no estaba secuestrado
Dispositivo para encontrar al israelí que no estaba secuestrado AHMAD GHARABLI | AFP

Niv Asraf y su amigo, Eran Nagauker, serán juzgados por engañar a las autoridades de Israel, que creían que había sido capturados por Palestina

04 abr 2015 . Actualizado a las 23:59 h.

El amor lo puede todo. O eso debía considerar un joven israelí de 22 años que fingió su propio secuestro para intentar recuperar a su novia. Sin embargo, no todo salió como esperaba ya que el viernes fue detenido junto con el amigo que lo estaba ayudando.

Según documentos de la justicia de los que la agencia AFP obtuvo una copia, Niv Asraf simuló su desaparición para tratar de reconquistarla con la ayuda de un amigo. El plan era, según los medios israelíes, regresar al cabo de unos días afirmando que había escapado de sus captores y provocar que su expareja volviera a caer en sus brazos.

La primera fase del plan para reconquistar a su novia se desarrolló sin problemas: un amigo suyo, Eran Nagauker, acudió a la policía para relatar que estaba conduciendo con Niv Asraf cuando se les pinchó una rueda cerca de la aldea palestina de Beit Hanun. Este último partió a buscar ayuda, pero no volvió, según relató a las autorizadades.

Rápidamente, decenas de efectivos desde policías, soldados y hasta miembros del servicio de seguridad interior Shin Beth se desplegaron en los alrededores de Beit Hanun, registrando casas y campos e instalando controles en las carreteras creyendo que había sido capturados por los palestinos, dando lugar a una intensa búsqueda. En total, según las autoridades, la búsqueda costó 240.000 euros. Todo este despliegue estaba provocado porque en junio del 2014, en la misma zona, tres jóvenes israelíes fueron secuestrados y asesinados, provocando una escalada de violencia que desembocó semanas después en una sangrienta ofensiva israelí contra la franja de Gaza.

Sin embargo, hacia medianoche, Niv Asfar fue descubierto cerca de la colonia judía de Kiryat Arba, no lejos de Hebrón, enfundado en un saco de dormir, con víveres. Al darse cuenta de lo que había sucedido, las autoridades procedieron a su detención y también a la de su amigo. Los dos hombres están acusados de falsificación de pruebas, alteración del orden público y obstrucción a la justicia.