Carlos Malamud: «Caracas debería aplicar un programa de ajustes serios que implicarían grandes sacrificios para el pueblo y el Gobierno»

m.c. REDACCIÓN / LA VOZ

INTERNACIONAL

El experto para América Latina del Real Instituto Elcano está convencido de que lo que está ocurriendo en el estado caribeño es «francamente preocupante»

10 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

No es nada optimista. El estado de desabastecimiento y de inflación continuada que está viviendo Venezuela dos años después de la muerte de Hugo Chávez no se lo permite. Carlos Malamud, catedrático de la UNED y experto para América Latina del Real Instituto Elcano, está convencido de que lo que está ocurriendo en el estado caribeño es «francamente preocupante».

-¿Por qué pasa todo eso ahora?

-La bajada del precio del barril de petróleo, que ha pasado de superar a los 100 dólares a colocarse por debajo de los 50, ha cambiado drásticamente el presente y el futuro económico del país. Luego están los problemas que ya había con Chávez: la inflación, que era de las más altas de América Latina, ahora ya resulta la más elevada del planeta. Luego está el desabastecimiento, que ya estaba presente debido a la destrucción de los mecanismos de mercado. Pero la desaparición de Chávez ha influido porque Nicolás Maduro no tiene su carisma. No tiene capacidad de liderazgo, y los chavistas tienen ahora la gran preocupación de mantenerse en el poder.

-Está previsto que haya elecciones. ¿Qué cree que va a pasar en ellas?

-Primero hay que ver que efectivamente se celebren. El jueves pasado Nicolás Maduro decía que las harían, pero todavía no sabemos cuándo. Además tampoco hay garantías de que la oposición pueda acceder a ellas en igualdad de condiciones que el partido oficialista. Basta con comprobar que cuatro de los jueces encargados de velar por la integridad del proceso electoral son partidarios del Gobierno.

-¿No puede enviar observadores la comunidad internacional?

-Podría estar en condiciones de hacerlo, pero el Gobierno no es partidario de ello.

-La alianza de Venezuela con China, ¿no es un arma que se le puede volver en contra?

-China ha aportado a Venezuela más de 45.000 millones de dólares a través de diferentes mecanismos a cambio de petróleo. Eso es algo que compromete el futuro de Venezuela. El problema no es el futuro, es el presente.

-¿No sabe cómo podría cambiar todo esto?

-Es algo que han de resolver los venezolanos. Dentro de la comunidad internacional hay una diferencia entre la postura de la UE y Estados Unidos, que están preocupados por lo que está ocurriendo, frente a la de América Latina, donde buena parte de los Gobiernos opinan que eso es un problema interno de Venezuela.

-¿Tendrían estos últimos que comprometerse más con Venezuela?

-Deberían hacerlo. Resulta importante el diálogo entre el Gobierno y la oposición. A partir de ahí debería haber un programa de ajustes muy serio, lo que implica grandes sacrificios para el pueblo pero también para el Gobierno. Pero Maduro no está por la labor de dialogar. El diálogo es muy complicado.

-¿Que tipo de sacrificios deberían hacer?

-Habría que recortar los subsidios que aplican a la gasolina y los productos de primera necesidad, lo que provocaría un alza de tarifas. Deberían recortar las ayudas sociales. Pero eso podría provocar revueltas, como ocurrió con el caracazo en su día.