El Ejército proclama a Isaac Zida líder de Burkina Faso

Agencias

INTERNACIONAL

Blaise Compaoré se refugia desde ayer en Yamusukro, capital política de Costa de Marfil

01 nov 2014 . Actualizado a las 20:06 h.

El Ejército de Burkina Faso ha terminado este sábado con la confusión en torno al liderazgo del periodo de transición abierto tras la marcha ayer del jefe de Estado, Blaise Compaoré, al designar de forma unánime como presidente al teniente coronel Yacouba Isaac Zida. La elección de Zida, hasta ahora número dos de la guardia presidencial, como líder de la transición se produjo tras una reunión de altos mandos del Ejército celebrada en la capital del país, Uagadugú, escenario de las masivas protestas que lograron desalojar este viernes a Compaoré, tras 27 años como presidente.

El encuentro tuvo lugar, precisamente, en la sede de la Jefatura del Estado Mayor, cuyo titular, Honoré Nabere Traoré, se había autoproclamado líder de la transición inmediatamente después de la huida de Compaoré hacia Costa de Marfil, donde se ha exiliado. A primera hora de este sábado, Zida desmentía este anuncio y aseguraba que sería él mismo quien asumiría la Presidencia, asumiendo en una situación de total confusión al país, cuyas calles comenzaban a recuperar la calma tras haber ardido durante toda la semana en multitudinarias protestas y altercados.

Las divisiones en el seno del Ejército fueron zanjadas, finalmente, con un comunicado difundido sobre las 13.00, hora local y GMT, suscrito por el propio Traoré, en el que el jefe del Estado Mayor reconocía haber sido víctima de una «confusión» al haber asumido el poder. «La alta jerarquía del Ejército, tras conversaciones con el jefe del Estado Mayor, informa a la opinión pública nacional e internacional que el teniente coronel Isaac Zida ha sido elegido de forma unánime para dirigir el periodo de transición», reza la declaración. De acuerdo con el comunicado, «la forma y duración» de este periodo de transición serán determinados posteriormente en concertación con «todos los integrantes de la nación».

Los integrantes de las Fuerzas Armadas remarcaron la «unión» y «cohesión» en su seno, y deploraron la pérdida de vidas humanas, para la que todavía no se han dado cifras oficiales, aunque según los medios locales habría sido de al menos 30. El principal hospital de Uagadugú, el Yalgado Ouedraogo, admitió a 90 pacientes con heridas de bala o provocadas por las estampidas durante las manifestaciones de ayer, dijo su director, Robert Sangare.

Los principales partidos de la oposición han manifestado, sin embargo, este sábado su rechazo a la toma del poder por parte del teniente coronel Zida y han convocado una serie de manifestaciones para este mismo domingo.

Masivas protestas ciudadanas

Forzado por las masivas protestas ciudadanas que han exigido durante toda la semana que no prolongara su mandato, al que accedió en 1987 tras un golpe de estado, Compaoré dimitió ayer de su cargo para permitir la organización de elecciones. La Presidencia de Costa de Marfil confirmó que Blaise Compaoré se refugia desde el viernes en Yamusukro, capital política de Costa de Marfil. «El presidente de la República informa al pueblo marfileño, los residentes de Costa de Marfil y a la comunidad internacional que el presidente Blaise Compaoré, su familia y allegados han sido acogidos en Costa de Marfil», recoge la declaración. Desde el exilio, Compaoré indicó en un comunicado que aceptaba ser «el chivo expiatorio» que el pueblo burkinés necesita para permanecer unido y afirmó haber perdonado a quienes le habían «traicionado».

Las calles de Uagadugú y otras ciudades del país retomaron una relativa calma e iniciaron una campaña de limpieza y salubridad que ha implicado a un gran número de ciudadanos. No en vano, el incendio del Parlamento, ataques a las residencias de numerosos cargos públicos y saqueos en muchos comercios han dejado Uagadugú en un estado de posbélico.

Las protestas contra el presidente de Burkina Faso arrancaron el pasado miércoles, cuando miles de personas se manifestaron en la capital al grito de «Veintisiete años es suficiente», en alusión al tiempo que llevaba en el poder Compaoré, quien quería prolongar su mandato con una enmienda constitucional.

Desde su independencia en 1960 hasta la llegada de Compaoré a la presidencia en 1987, la historia de Burkina Faso, antes conocido como Alto Volta, se ha caracterizado por una sucesión de golpes de Estado.