Los pilotos del vuelo de Malasia: un veterano loco por los aviones y un joven «buen chico»

AFP

INTERNACIONAL

AHMAD YUSNI

Inteligencia de EE. UU. se inclina a ligarlos con la desaparición del Boeing 777 de Malaysia Airlines

16 mar 2014 . Actualizado a las 11:32 h.

La inteligencia estadounidense se está inclinando hacia la teoría de que el piloto y el copiloto del Boeing 777 de Malaysia Airlines del que no se sabe nada desde hace más de una semana son de algún modo responsablea de la desaparición del avión, según indicó la cadena CNN.

La cadena, que cita como fuente bajo anonimato a un funcionario estadounidense con «conocimiento directo» del caso, asegura que el Gobierno de Malasia llevaba días buscando registrar la casa del piloto, un malasio de 53 años y con 8.365 horas de vuelo.

Pero fue en las últimas 24 horas cuando la información recopilada por radares y satélite dio el aval suficiente a las autoridades malasias para registrar la casa del piloto, ubicada a las afueras de Kuala Lumpur.

El funcionario aclaró, no obstante, que todas las teorías que se barajan y las discusiones de la inteligencia se basan en las evaluaciones preliminares de lo que sabe hasta la fecha.

El primer ministro de Malasia, Najib Razak, reorientó este sábado hacia el océano Indico la búsqueda del avión desaparecido con 239 personas a bordo tras confirmar que alguien cambió el rumbo del Boeing 777, aunque rehusó hablar de secuestro.

En una rueda de prensa, Razak explicó que alguien desconectó los sistemas de comunicación del aparato de Malaysia Airlines e hizo que el avión cambiase de rumbo hacia el oeste y volase durante cinco horas.

La autoridades malasias no saben dónde se encuentra en estos momentos, pero suponen que se ubica en un corredor que abarca el oeste de Indonesia y el Índico, o en otro que va desde el norte de Tailandia hasta la frontera entre Kazajistán y Turkmenistán.

Perfiles de los pilotos

El comandante del Boeing 777 de Malaysia Airlines desaparecido es un fanático de los aviones, al punto que armó su propio simulador de vuelo, y su joven copiloto «un buen chico», muy alejados de la imagen de Don Juan de los cockpits mitificada por la televisión, según su entorno.

El vuelo MH370 se «esfumó» hace ya ocho días atrás, una hora después de haber decolado de Kuala Lumpur con destino a Pekín.

Esto provocó una búsqueda masiva en una zona al principio equivalente a la superficie de Portugal, pero que se ha ido ampliando según se han ido revelando nuevos datos. Por ahora, este relevamiento marítimo por cielo y mar, en el que participan varias naciones, entre ellas China, Estados Unidos y Japón, no ha arrojado resultados.

La última tesis oficial del gobierno malasio afirma que el avión fue «deliberadamente desviado» y que, con los aparatos de comunicación desactivados, siguió volando al menos durante casi siete horas tras quedar indetectable para los radares civiles.

Los investigadores analizan los perfiles de los 227 pasajeros y de los 12 miembros de la tripulación que se encontraban a bordo, estudiando en particular la pista de un eventual sabotaje, aunque nada ha quedado del todo descartado.

La personalidad y la vida de los dos pilotos, el comandante Zaharie Ahmad Shah, de 53 años de edad, y su copiloto, Fariq Abdul Hamid, de 27 años, son examinadas detalladamente por los investigadores e, inclusive, por los medios de comunicación.

La televisión australiana emitió durante esta semana una entrevista a una joven sudafricana, quien afirmó haber sido invitada a entrar en la cabina por Hamid y uno de sus colegas durante un vuelo entre Phuket (Tailandia) y Kuala Lumpur, en 2011.

A partir de los atentados en Nueva York del 11 de setiembre de 2001, está formalmente prohibido invitar a cualquier pasajero a la cabina de pilotaje durante el vuelo. Malaysia Airlines señaló que quedó «conmocionada» por estas afirmaciones, cuya autenticidad no puede verificar.

«Un piloto cabal»

El joven se integró a la compañía aérea con apenas 20 años de edad, tras estudiar pilotaje en la isla malasia de Langkawi. El mismo es hijo de un alto responsable del ministerio de Obras Públicas de uno de los estados malayos.

Es un «buen muchacho», de naturaleza dócil, que frecuentaba habitualmente la mezquita de su barrio, a las afueras de Kuala Lumpur, indicó el imán de la misma. De vez en cuando acudía a cursos de educación religiosa.

El imán Ahmad Sharafi Ali Asrah rechazó de plano la acusación sobre violación de la seguridad por parte del joven piloto. «Esto no tiene el menor asidero. Creo que es sólo un medio para desacreditar a Fariq o a la compañía aérea», señaló el responsable religioso.

«Es un buen chico, que no busca para nada la notoriedad», agregó.

Fariq Abdul Hamid apareció en febrero pasado en un programa de la CNN, en el cual ayudaba a pilotar un Boeing 777-200 en ruta desde Hong Kong a Kuala Lumpur, con el corresponsal de la cadena de televisión, Richard Quest, a bordo.

«Fue interesante ver cómo posó el avión en la pista», declaró el periodista en el sitio en internet de la CNN, calificando la técnica de Fariq como «perfecta».

En cuanto a Zaharie, se trata de un veterano del pilotaje, quien comenzó a trabajar en la compañía malasia en 1981 y cuenta en su activo con la friolera de 18.365 horas de vuelo.

Según una web creada el sábado, consagrada al comandante del avión, éste amaba tanto volar al punto que fabricó su propio simulador para poder continuar dando rienda suelta a su pasión de regreso a su hogar.

Pero, también colgó varios videos en YouTube en los que explica, con entusiasmo, cómo reparar un aparato de climatización, ventanas desvencijadas, y otros trabajos de bricolaje.

Sus colegas citados en los medios de comunicación malasios lo describen como «un piloto cabal», quien fue autorizado por los responsables de la aviación civil de su país para tomar exámenes a aviadores en simuladores de vuelo.

Malaysia Airlines rechazó brindar información sobre el comandante y su copiloto, en tanto nada incongruente ha salido a relucir sobre ellos hasta ahora.