El presidente de Estados Unidos dio la talla antes las preguntas incómodas en el programa de Zach Galifianakis
11 mar 2014 . Actualizado a las 22:45 h.El presidente de EEUU, Barack Obama, dio la talla en una entrevista transmitida hoy en la popular página web Funny or Die con el actor y comediante Zach Galifianakis, conocido por acorralar y hacer preguntas incómodas a sus invitados.
Obama apareció en el programa de entrevistas satíricas Between Two Ferns de Galifianakis y aguantó bien el tipo ante las preguntas envenenadas del actor, con respuestas ingeniosas durante los poco más de seis minutos de conversación. El objetivo del presidente con esta entrevista era, ante todo, promocionar entre los jóvenes la inscripción en los nuevos seguros médicos previstos en su reforma sanitaria, pero también se colaron en el diálogo otros asuntos como el espionaje de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) revelado por Edward Snowden.
«Yo no tengo teléfono, estoy fuera de la red. No quiero que tu gente lea mis mensajes, ¿entiendes?», ironizó Galifianakis sobre ese espionaje. El contraataque de Obama fue: «En primer lugar, Zach, nadie está interesado en tus mensajes».
El actor le preguntó sobre qué se siente «al ser el último presidente negro» y Obama tampoco se amilanó. «¿En serio? ¿Qué se siente al ser la última vez que hablas con un presidente?», aseguró.
Cuando el comediante aludió a que Obama no podrá aspirar a un tercer mandato, porque así lo establece la Constitución, el presidente aprovechó para ironizar sobre la saga cinematográfica de humor Resacón en Las Vegas, protagonizada entre otros por Galifianakis. En caso de que hubiera un tercer mandato, «sería algo así como hacer una tercera película de Resacón. Realmente no funcionó muy bien, ¿verdad?», destacó Obama.
Si hubo algún momento de incomodidad fue cuando Galifianakis sugirió que, si el presidente tuviera un hijo varón, probablemente sería un «nerd» como él. «¿Cree usted que una mujer como Michelle Obama se casaría con un 'nerd'?», dijo Obama indignado.
Al final de la conversación Obama pulsó un botón, un telón de fondo cayó y quedó al descubierto que la entrevista se grabó en la Casa Blanca. «¿Usted ha estado grabando estos programas aquí en la Sala Diplomática? ¿Quién le dio permiso?», increpó el presidente a Galifianakis, que respondió tímidamente: «Bush».