La primera dama francesa sale en defensa de la alumna kosovar expulsada

Efe

INTERNACIONAL

Declara que «la escuela es un lugar de integración, no de exclusión»

18 oct 2013 . Actualizado a las 16:31 h.

La primera dama francesa, Valérie Trierweiler, salió hoy en defensa de la alumna gitana expulsada la semana pasada tras haber sido detenida durante una excursión escolar, alegando que hay ciertas fronteras que no se deben cruzar. «La escuela es un lugar de integración, no de exclusión», indicó a la prensa desde Angers, en el oeste de Francia, asegurando que «la puerta de la escuela» es una de esas «fronteras» que deberían ser respetadas. La niña expulsada, Leonarda Dibrani, de 15 años de edad, cursaba tercero en el colegio André Malraux de Pontarlier y se dirigía con sus compañeros de clase y sus profesores el pasado 9 de octubre a visitar la ciudad de Sochaux, cerca de la frontera suiza, cuando fue detenida para, posteriormente, ser deportada a Kosovo.

Trierweiler no quiso pronunciarse hoy sobre «el fondo» del caso, ni expresarse sobre su hipotético regreso a Francia, pero sí dejó claro que la joven «no es responsable de lo que haya podido hacer su padre».

El padre, de origen kosovar, ha contribuido a la polémica al afirmar en la prensa que tanto su mujer como cinco de sus seis hijos, incluida Leonarda, nacieron en verdad en Italia, pero decidieron mentir sobre sus orígenes ante las autoridades de inmigración para tener más posibilidades de obtener el asilo.

Los resultados de la investigación sobre la detención de la alumna está previsto que sean entregados al Gobierno esta noche, y el Ejecutivo se pronunciará al respecto este fin de semana, bien a través del primer ministro, Jean-Marc Ayrault, o del ministro del Interior, Manuel Valls.