El Tribunal Supremo de Estados Unidos refuerza el matrimonio homosexual

Agencias

INTERNACIONAL

JONATHAN ERNST

La máxima instancia judicial del país tumba la ley que niega la igualdad de beneficios federeales a las parejas del mismo sexo

27 jun 2013 . Actualizado a las 00:49 h.

El Tribunal Supremo de Estados Unidos ha dado un serio respaldo a los derechos de las parejas homosexuales, al declarar inconstitucional una ley de 1996 que define al matrimonio como una unión entre un hombre y una mujer y que por tanto impedía a las parejas del mismo sexo recibir beneficios federales. Por una votación ajustada, de 5 a 4, el Supremo declaró inconstitucional esa ley, que impide que los homosexuales casados en los estados donde el matrimonio gai es legal logren reconocimiento y beneficios fiscales a nivel federal.

En un país donde 12 estados, además de la capital Washington DC, permiten a gais y lesbianas contraer matrimonio, el tribunal superior debía adoptar una postura en dos apelaciones y decidir si el principio de igualdad defendido por la Constitución ha sido violado. En el primer caso, una viuda homosexual de Nueva York, Edith Windsor, respaldada por el gobierno de Barack Obama, se opone a la Ley Federal de Defensa de Matrimonio (DOMA, por su sigla en inglés).

Esa polémica ley de 1996 niega a las parejas de gais y lesbianas los mismos derechos y beneficios federales de que gozan las parejas heterosexuales, desde recortes de impuestos y beneficios sociales hasta acceso a un cónyuge hospitalizado. La normativa -firmada entonces por un Bill Clinton que dice ya no apoyar- define el matrimonio como una unión entre un hombre y una mujer y prohíbe por tanto al gobierno federal ofrecer beneficios -fiscales, entre otros- o reconocer a las parejas homosexuales incluso aunque estén casadas legalmente según la ley de su estado.

El segundo caso se refería a la constitucionalidad de la Proposición 8 de California, una iniciativa electoral del 2008 que prohibió el matrimonio entre personas del mismo sexo en ese estado. En la vista celebrada el 26 y 27 de marzo, el Tribunal Supremo parecía dispuesta a derogar la DOMA, pero renuente a legalizar el matrimonio gai en California. Un 53% de los estadounidenses apoyan el matrimonio entre homosexuales, según una reciente encuesta realizada por el instituto de sondeos Gallup.

La decisión del Supremo es de procedimiento y no se pronuncia sobre el fondo del caso, algo que podría haber tenido repercusiones a nivel nacional. «Nunca antes hemos respaldado que ciudadanos privados tengan base para defender la constitucionalidad de un estatuto estatal cuando los funcionarios del estado han decidido no hacerlo. Nos negamos a hacerlo en este caso por primera vez», señaló el juez del Supremo John Roberts en el argumento de la mayoría.

«Éste es un gran día para Estados Unidos», dijo a la prensa a la salida del tribunal el abogado de las parejas homosexuales que pedían rechazar la medida, David Boies. La Proposición 8, que limita el matrimonio a la unión entre un hombre y una mujer, fue votada y aprobada en el 2008, seis meses después de que la legislatura estatal californiana aprobara el matrimonio homosexual. Un tribunal federal de San Francisco invalidó la medida en el 2010 por considerar que discriminaba de forma injusta a los homosexuales que deseaban casarse.