La mayoría de sus diputados son gente de la calle sin experiencia política
26 feb 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Es sin lugar a dudas el gran triunfador. El cómico genovés Beppe Grillo con su Movimiento 5 Estrellas (M5E) ha conseguido hasta el 25 % de los votos y se ha convertido en la segunda fuerza del país con 110 escaños en la Cámara de Diputados y 53 en el Senado. En sus manos está la gobernabilidad de Italia. Una gran responsabilidad para un grupo que nació en el 2008 a través de Internet y que está formado por ciudadanos sin experiencia de gobierno y casi desconocidos incluso para quien los ha votado.
Con un discurso populista y antisistema, Grillo y su M5E han sabido recoger la rabia y el cansancio de muchos electores hacia unos políticos que se han convertido en una casta alejada de la realidad. La crisis, los recortes de Monti y sobre todo los escándalos de corrupción que han tocado a todos los partidos tradicionales han sido el caldo de cultivo ideal para las proclamas exaltadas del humorista. Internet gratis para todos, un salario social de mil euros para los desocupados, energía verde, jubilación a los 60 años y un referendo sobre el euro son algunas de sus propuestas.
Pero en las que hace especial hincapié es en la reducción de los parlamentarios, de sus sueldos y de todas las ventajas de que gozan. Los bancos y los partidos fueron víctimas de sus sarcasmos y sus insultos en exaltados mítines en los que no dejó títere con cabeza. Durante la campaña, Beppe Grillo ha huidos de la televisión y se ha centrado en los mítines callejeros con su Tsunami Tour que en su cierre de campaña logró reunir a 80.000 personas en Roma.
Sin causas con la Justicia
Los nuevos parlamentarios han sido elegidos a través de Internet, de manera directa, entra gente de la calle. Solo tenían que demostrar que no habían tenido problemas con la justicia. Son en su mayoría jóvenes, licenciados y parados, que se comunican a través de la plataforma virtual creada por Grillo y su web La Cosa. Carecen de experiencia política, aunque algunos han hecho sus pinitos en ayuntamientos y en movimientos populares, por lo que es una incógnita cómo será su trabajo en el Parlamento.
Al carecer de comité electoral, ayer muchos periodistas se acercaron a la casa de Grillo en Génova a la espera de que hiciera alguna declaración. Pero era en Internet donde se podía conocer de primera mano el humor de sus seguidores: «Tomaremos Roma» y «seremos la aguja de la balanza», son algunos de los entusiasmados comentarios.