Garzón asegura que Assange está bien, pero no puede seguir más en la embajada

AFP

INTERNACIONAL

El juez considera que la salud física y mental del fundador de Wikileaks puede deteriorarse si pasa más tiempo encerrado en el consulado de Ecudador en el Reino Unido

10 nov 2012 . Actualizado a las 21:33 h.

El fundador de Wikileaks, Julian Assange, está bien, pero no puede continuar mucho más en la embajada de Ecuador en Londres porque su salud puede deteriorarse, ha afirmado hoy en Brasilia Baltasar Garzón, encargado de su defensa.

«Él -Assange- está bien, pero la situación se deteriora por momentos», ha indicado Garzón, quien ha afirmado que si su estancia en la embajada se prolonga «tendremos problemas médicos importantes» y «problemas psicológicos que pueden venir», principalmente debido a las condiciones de su encierro.

Garzón ha explicado que Assange, que se encuentra refugiado en la embajada de Ecuador en Londres desde el 19 de junio, ocupa allí una «habitación de reducidas dimensiones» sin las condiciones que hasta un centro penitenciario le garantizaría.

Garzón, que fue llamado por Assange a coordinar su defensa, reclama a Gran Bretaña que permita la salida de Assange de la embajada con un salvoconducto para que pueda asumir el asilo que le otorgó Ecuador en agosto. Aseguró que Assange, de 41 años, no pretende eludir un juicio en Suecia, donde se lo acusa de agresión sexual, sino evitar ser extraditado a Estados Unidos, donde teme ser juzgado por espionaje, debido a los 250.000 cables diplomáticos estadounidenses que publicó Wikileaks.

«Nosotros queremos que ese juicio -en Suecia- se produzca, pero queremos que ocurra en unas condiciones de seguridad» de que no habrá extradición a Estados Unidos, ha explicado Garzón. «Tenemos elementos para demostrar que no hubo los delitos que se le imputan» en Suecia, ha asegurado. Para el juez, no hay causa jurídica real contra Assange, sino que se trata de un caso en el que «se tiene un enemigo, se construye la figura jurídica que mejor se le aplique para condenarlo». «No hay justificación de la persecución de Julian Assange», aseguró.

El viceministro de Relaciones Exteriores ecuatoriano, Marco Albuja, por su parte, declaró en octubre que su gobierno está «muy preocupado» por el estado de salud de Assange, que «adelgazó mucho».