Inglaterra y Gales optan por privatizar la policía por los recortes presupuestarios

imanol allende LONDRES / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

La polémica saltó al filtrarse el viernes que la policía de West Midlands y Surrey han aceptado ofertas de compañías como G4S para que se hagan cargo del seguimiento de individuos peligrosos

04 mar 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

El proceso de privatización de parte de las funciones policiales en el Reino Unido tomó mayor fuerza en las últimas horas tras desvelarse los planes presentados por dos de las mayores fuerzas policiales del país, las de los condados de West Midlands y Surrey para privatizar parte de sus responsabilidades consideradas como «policiales», entre ellas la investigación de delitos, patrullaje y la detención de sospechosos.

En un momento en el que la policía de Inglaterra y Gales hace frente a un descenso del 20 % en sus fondos de los próximos cuatro años, consecuencia de los recortes públicos aplicados por el Gobierno del conservador David Cameron, la idea de privatizar sus funciones más costosas es muy atractiva. «El problema es cuando la privatización se ha pasado de la raya, y alcanza los servicios puramente policiales», tal y como advirtió Yvette Cooper, portavoz del Partido Laborista.

La polémica saltó al filtrarse el viernes que la policía de West Midlands y Surrey han aceptado ofertas de compañías como G4S para que se hagan cargo del seguimiento de individuos peligrosos e incluso de la detención de sospechosos. El contrato está valorado en unos 1.800 millones de euros durante siete años, aunque podría pasar a casi 4.000 millones si se suman otros cuerpos de policía. Este contrato, de confirmarse, empequeñecerá el acuerdo alcanzado entre la policía de Lincolnshire y G4S, por valor de unos 230 millones de euros. Según este contrato, la mitad del personal civil de la fuerza policial se unirá a la empresa de seguridad privada, que también construirá y gestionará una comisaría.

La ministra del Interior británica, Theresa May, espera que estos acuerdos de semiprivatización de las policías de West Midlands y Surrey, englobado en un programa al que el Gobierno de Cameron ha dado el vago título de «Sociedad Comercial», esté funcionando en unas semanas.

En manos privadas

La lista de las actividades policiales que «legalmente» pueden pasar a manos privadas incluye la investigación de crímenes, la detención de sospechosos, casos policiales en vías de desarrollo, testigos, la gestión de personas de alto riesgo, el patrullaje de barrios, obtención de información, y labores de apoyo policial como la gestión de medicina forense, la prestación de servicios jurídicos, la gestión de la flota de vehículos, finanzas y recursos humanos.

Para Simon Reed, vicepresidente de la Federación Policial de Inglaterra y Gales, estas propuestas de privatización tendrán «unas consecuencias catastróficas y llevarán a la destrucción del buen trabajo policial realizado».