Jorge Mario Bergoglio, de jesuita de bajo perfil a Francisco

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Llegó al cónclave como un candidato marginal y se convierte en el primer papa jesuita y latinoamericano de la historia

15 mar 2013 . Actualizado a las 12:19 h.

Con el argentino Jorge Mario Bergoglio por primera vez hay un papa latinoamericano, el pontífice número 266 de la Iglesia católica.

El arzobispo de Buenos Aires, de 76 años, fue elegido hoy papa y llevará el nombre de Francisco . En el último cónclave de 2005, el jesuita de baja exposición había sido el rival más fuerte de Joseph Ratzinger.

Ya tras la muerte de Juan Pablo II, Jorge Mario Bergoglio estuvo entre los candidatos a sucederlo. Fuentes periodísticas indicaron que obtuvo 40 de los 77 votos necesarios para ser elegido papa y quedó en segundo lugar, detrás de Ratzinger. Con una salud algo quebradiza, llegó a este cónclave más bien como un candidato marginal.

El arzobispo de Buenos Aires y primado de Argentina privilegia sobre todo una presencia preferencialmente discreta ante la opinión pública.

Así, por ejemplo, se pudo ver al cardenal en varias ocasiones por el subterráneo en camino a la Catedral de Plaza de Mayo, en el centro de la ciudad de Buenos Aires. También por Roma, Jorge Mario Bergoglio se paseó por lo general envuelto en un sobretodo oscuro y sin el birrete de cardenal.

En los últimos años chocó varias veces con los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner, con sus críticas por la corrupción y la pobreza, así como con su campaña frontal -pero infructuosa- contra la legalización del matrimonio homosexual.

Bergoglio nació el 17 de diciembre de 1936 como hijo de inmigrantes italianos. Su padre fue empleado de ferrocarriles en la capital argentina. Allí fue a una escuela técnica, donde se recibió como técnico químico. Con 21 años ingresó en el seminario.

Tras su ordenación sacerdotal en 1969, Jorge Mario Bergoglio realizó estudios de teología y entre 1973 y 1979 fue superior provincial de los jesuitas. En esos difíciles años de Argentina, durante los cuales gobernó una dictadura militar, Bergoglio condujo con autoridad su orden hacia actividades estrictamente religiosas.

Jorge Antonio Bergoglio, el único jesuita en el cónclave asumió en 1998 la arquidiócesis de Buenos Aires y durante el consistorio del 21 de febrero de 2001, el papa Juan Pablo II lo nombró cardenal.