O Pé, un grupo de amigos celtistas convertido en peña inquebrantable

ZONA CELESTE

CEDIDA

El colectivo de San Cibrao, creado en 1995,  es uno de los más veteranos

11 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El origen de la Peña Celtista O Pé de San Cibrao está en «una docena de entusiastas del Celta» -explica uno de ellos, Maximino Poceiro- que querían constituirse como agrupación celtista con el objetivo de poder hacer «por lo menos un viaje a Balaídos al año con el equipo». De aquello han pasado casi 22 años en los que han podido cumplir su objetivo e ir a más.

«La peña fue constituida el 4 de noviembre de 1995 en la cafetería Bellavista, hoy cervecería Las Titas. Aquí siempre ha habido mucha tradición celtista y al comenzar éramos unos 25», señala. Al frente, los hermanos Balbino (el ya fallecido primer presidente) y Fernando López Abad, Pepe Fernández Naval como vicepresidente, Xermán Sánchez como primer vocal y el propio Maximino como secretario. Actualmente son unos 80 que se dividen entre el grupo de fundadores, entre 60 y 70 años, y «las nuevas incorporaciones, entre 35 y 35».

Se definen como «una peña muy tranquila, un grupo de amigos celtistas que va creciendo cada año». Se reúnen para ver los partidos y como momento más esperado tienen siempre el escogido para desplazarse a Balaídos. «Nos encontramos a una distancia de 270 kilómetros, por lo que no es factible desplazarnos para todos los partidos», lamenta. De ahí que cuando lo hacen se viva con un especial entusiasmo. «En los inicios viajábamos el mismo día y desde hace quince años lo hacemos la víspera, pernoctando en Vigo o alrededores». También han presenciado partidos en campos como los de la Real Sociedad, el Athletic Club, el Racing de Santander, el Sporting de Gijón o el Valladolid.

Conviven en la localidad con una peña deportivista y en la relación con ella hacen gala de esa tranquilidad que asegura Maximino que les caracteriza como colectivo celtista. «Nos llevamos muy bien», comenta. Lo mismo con las demás peñas celtistas, especialmente con las de su zona, como las de los municipios de Burela y Viveiro, de las más antiguas y con las que se suelen poner de acuerdo para realizar viajes en común. «Es habitual también que peñistas nuestros viajen con ellos y al revés».

Durante los años de Segunda, aseguran que su actividad no se resintió en absoluto. Siguieron adelante con los mismos peñistas y con la rutina con la que se pusieron en marcha en 1995. «Nos hemos seguido reuniendo, haciendo cenas, organizando los mismos viajes que en Primera. Y cabe destacar que estuvimos en Valladolid, en el famoso partido que se ganó y que permitió luego la permanencia». Actualmente, disfrutando de un año como el que esta firmando el equipo, «toda la peña se encuentra entusiasmada».

Su nombre, O Pé, responde «a uno de los tres islotes que forman Os Farillóns, islas próximas a San Cibrao». Su primera idea era el nombre de San Cibrao sin más, pero al ser rechazado en el Registo de Sociedades se vieron abocados a buscar una alternativa. «Esas islas figuran en nuestro escudo. O Pé es la más fuerte de las tres», finaliza.