Empezaron como una «peña autobús» que, diez años después, ha crecido de manera notable
15 jul 2015 . Actualizado a las 22:49 h.Presumen de ser «de los del 4%». La peña celtista Os Zoqueiros de O Porriño tuvo que aguantar hace algo más de dos años las burlas de quienes les consideraban unos ilusos por molestarse y gastarse dinero en viajar a Valladolid para apoyar al Celta en el penúltimo partido de la liga 2012/2013, cuando el equipo tenía todas las de perder en la lucha por eludir el descenso. Pero ellos -junto con un grupo bien nutrido de aficionados- creyeron, se desplazaron y tuvieron recompensa. «Nos vacilaban y al final fuimos nosotros los que acabamos riéndonos de un montón de gente», recuerda orgulloso su presidente, Javier Bastos.
Pero la historia de celtismo incondicional de este colectivo empieza mucho antes, pues van camino ya de la celebración de su décimo aniversario, el próximo año. «Todo empezó en junio del 2006. En O Porriño siempre ha habido muchísima tradición celtista, es muy común ver a niños por la calle con las camisetas, pero el paso de constituir la peña fue más que nada para poder tener un autobús en el que desplazarnos a Balaídos», dice el presidente. Entre sus 120 miembros -en este tiempo se han duplicado- había mucha gente mayor con problemas de movilidad, pero que compartía las ganas de disfrutar del equipo de los más jóvenes.
Inicialmente tuvieron su sede en el Círculo Recreativo Cultural, y con el tiempo la pasaron a la Cafetería Zentral, donde están asentados actualmente, para poder disponer de una tele donde seguir los choques del Celta. «No es algo escrito que nos reunamos allí para ver los partidos de fuera, pero sí que solemos juntarnos», explica sobre un establecimiento repleto de bufandas y banderas del equipo vigués y donde se respira celtismo por los cuatro costados.
Aunque la media de edad de los miembros ronda los 35 o 40 años, tienen muchos niños que bajan la media. «Se van sumando los hijos de los socios, celtistas ya de tercera generación. Porque luego está también la gente mayor que lleva siguiendo al equipo toda la vida». Admite que estos a veces «van un poco más a su bola» porque tienen quizá otra manera de concebir la afición por un equipo, pero esa afición en sí misma es la que les une a todos. «Tenemos gente de 70 u 80 años con números de abonados del club muy bajitos, por debajo del 100. Eso siempre es un orgullo».
Entre sus abonados también se encuentra el actor porriñés Rubén Giráldez, conocido por el nombre artístico de Rubén de Marina, que ha utilizado su medio de vida, el audiovisual, también para expresar su afición por el Celta. «Ha hecho varios vídeos que reflejan muy bien el sentimiento celtista y también es un honor que forme parte de Os Zoqueiros». Este es uno de ellos:
Con el nombre de la peña no lo tuvieron complicado, pues los zoqueiros son «algo muy característico de O Porriño», un oficio perdido que en su día fue de vital importancia en la localidad y al que quisieron homenajear de esta manera. «Había habido otra peña previamente que acabó por desaparecer y ahora hay rumores de que quieren crear una nueva. Pero nosotros aquí seguiremos», dice Bastos, que tomó el relevo del anterior presidente, Manuel Vidal, también en la faceta de vocal de la Federación de Peñas.
Acostumbrados a hacer una comida de final de temporada como evento grande de la peña -que también organiza algún que otro viaje-, ahora se plantean «hacer algo más grande para el décimo aniversario. «La Federación en estos casos te manda a un par de jugadores y nos gustaría hacer algo bonito, también con actividades paralelas, sobre todo para los niños», anuncia. En lo que a jugadores se refiere, sentían un cariño especial por Jonathan Vila, originario de su localidad. «Llegó un momento en el que no tenía sitio en el equipo y hay que asumirlo. Ahora tenemos a Rubén, que aunque es de Mos, vive en O Porriño».
