Un puñado de valientes en Járkov

m. v. f. VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

CEDIDA

La situación de Ucrania disuadió a muchos aficionados de acompañar al Celta, pero unos 15 sí estarán

22 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Les han llamado locos y han intentado convencerles de quedarse en casa y seguir el partido por televisión. No ha servido de nada. Mientras a algunos aficionados el solo hecho de conocer el rival les hizo renunciar a su idea inicial de acompañar al Celta en los dieciseisavos de final de la Europa League, otros han persistido y estarán en Járkov. Unos quince viajarán en el chárter del club y algunos más por su cuenta. Un puñado de valientes.

«Al principio te entra la duda. Sabes que están en guerra y te provoca algo de miedo. Pero estamos seguros de que no va a haber problemas y vamos con ganas de vivir el partido y conseguir la clasificación», cuenta Berto Carballo, de Preferencia Celeste, que admite que quizá no se hubiera animado si su amigo Samuel Rivas no hubiera tirado de él. «Desde el principio quisimos ir, pero cuando se supo el rival estábamos comentando el sorteo en un grupo de WhatsApp y fue un mazazo. Algunos ya cambiaron toda su intención de ir por un no rotundo», sigue Berto.

Samu se apresuró a decirle si seguía en pie la idea de ambos y Carballo respondió que lo tenía que pensar. Pero al final se decidió rápido. Su amigo apenas dudó. «Respeto te da, pero nos estuvimos informando de la situación y desde el club también nos tranquilizaron mucho. Sabemos que la zona de guerra está muy delimitada y que si hubiera algún riesgo la UEFA no permitiría que se disputara el partido», reflexiona Rivas.

En la decisión de ambos ha pesado la incertidumbre de no saber cuándo volverán a estar ante una oportunidad similar. «Somos jóvenes -22 años-, no recordamos las anteriores participaciones europeas del equipo y tampoco pudimos estar en partidos de fuera de la fase de grupos. No nos queríamos quedar con las ganas», comenta Berto. Le secunda Samuel: «Esperemos que no sea la última vez, pero no lo sabemos. Y por nada queríamos dejar pasar esta ocasión».

En lo estrictamente deportivo, los dos coinciden en que el Shakhtar no evidenció sobre el Celta en la ida la superioridad que se le presuponía. «Creo que no demostraron ser mejor equipo que nosotros y confío 100 % en la remontada. Además, no es que necesites una diferencia de dos goles o tres, es que con ganar o fuerzas la prórroga o pasas», recuerda. Carballo lo ve algo más complicado, pero también es optimista. «Esperaba a un Shakhtar dominador y no fue así. Obviamente es difícil, tenemos que anotar como mínimo un gol y jugamos fuera, pero creo que podemos hacerlo». Ambos estuvieron en la semifinal de Mendizorroza. «Fue un palo, pero no había tiempo para lamentarse porque queda otra competición que nos puede hacer soñar».

A Ucrania en familia

Si Berto y Samuel viajan por su cuenta, Álvaro Torras y familia se desplazarán en el chárter del Celta. «Es especial, porque vamos mi hermano, mi padre y yo por primera vez. Él nos metió el gusanillo del Celta e íbamos los tres al estadio, pero teníamos la espinita del viaje juntos», dice el peñista de La Previa. Asegura que van tranquilos, a disfrutar y con la idea de que «te puede pasar cualquier cosa en cualquier sitio al que vayas». Lo que no pasa todos los días, dice, es ver al Celta en Europa. Ese es su impulso.