Aspas, Wass, Guidetti y Drazic han corrido suerte dispar en los últimos doce meses
05 sep 2016 . Actualizado a las 11:58 h.Aspas, Wass, Guidetti y Drazic tienen en común su llegada al Celta -en el caso del moañés, su regreso- hace un año, en el mercado de verano del 2015. El club apostó entonces por reforzarse con cuatro jugadores que ahora afrontan su segundo año como celestes después de haber tenido una suerte muy dispar en el primero. A los cuatro les esperan retos muy diferentes de cara a mejorar el curso 2015/2016.
Aspas
Los números del moañés hablan por sí solos. Las dudas que para muchos generó su vuelta tras dos temporadas prácticamente en blanco se encargó Aspas de disiparlas a las primeras de cambio. Berizzo apostó por él como delantero titular desde el primer partido y en muy contadas ocasiones le sacrificó del once. Él respondió con lo principal que se le pide a un delantero, los goles (un total de catorce en Liga, superando su precedente en Primera con el Celta, de doce), pero también mostrándose como un futbolista más maduro y más implicado en tareas defensivas cuando la ocasión lo requería.
El reto de Aspas para esta nueva temporada es mantener su nivel. A sus 29 años recién cumplidos, el atacante buscará volver a ser protagonista y asumir parte del liderazgo que Nolito ha dejado vacante. Para ello, además, ha pasado a ser el cuarto capitán del equipo, lo que da una idea de su peso en el vestuario. La Liga no ha comenzado bien para Iago, que además de la derrota, se lesionó en el choque frente al Leganés. Pero ya ha podido pasar página de las dos cosas, recibiendo el alta y participando en un choque frente al Real Madrid en el que la imagen del grupo fue completamente distinta.
Wass
Llegaba al Celta recomendado por Krohn-Dehli y a su vez su compatriota danés le había aconsejado a él que eligiera Vigo. Daniel Wass llegó al equipo rechazando la idea de que lo hiciera como sustituto del ahora futbolista del Sevilla y enseguida demostró que era un futbolista diferente pero muy válido para el Celta, al que no le costó adaptarse para hacerse pronto con un hueco en el esquema de Berizzo.
36 partidos de liga, y 31 de ellos de inicio, son números que hablan de la importancia de Wass en el equipo el curso pasado. Su polivalencia permitió que el Toto no recurriera a él solo en sus posiciones más habituales en el doble pivote o como interior, sino que llegó a actuar incluso como lateral. Respecto al futuro, está por ver precisamente qué ubicación le va a encontrar Berizzo. En función de dónde coloque a Orellana, el danés podría perder su sitio en favor del Tucu, cosa que no ocurrió en el inicio liguero al dejar al argentino nacionalizado chileno en el banquillo, ni tampoco en el Bernabéu, con la baja de Marcelo.
Guidetti
Al poco de llegar, se había convertido en un ídolo para la afición, pero más por su carisma que por sus prestaciones sobre el terreno de juego. Se presentaba como una fuerte competencia para Aspas que no fue tal, ya que el sueco se convirtió casi siempre en el recambio del moañés, o en una opción para convivir juntos en los últimos minutos de algunos partidos puntuales.
Guidetti marcó goles importantes, sobre todo en Copa, competición de la que incluso fue pichichi. Pero dejó la sensación de que podía haber dado mucho más, algo que él mismo ha reconocido en más de una ocasión durante este verano en declaraciones a medios suecos. En el debut de Liga volvió a ser suplente y en los minutos de los que dispuso no logró mejorar al equipo ni aportar soluciones; frente al Real Madrid estuvo mejor, siempre muy luchador. Los inicios de Liga no parecen su fuerte, y menos tras haber disputado este verano la Eurocopa con su selección.
Drazic
Un año después, la vida seguía igual para Drazic hasta hace unos días. En los dos primeros compromisos de Liga volvió a ser uno de los descartes, su situación más repetida la pasada campaña, pero poco antes del cierre del mercado se confirmó su cesión al Valladolid. A sus 20 años -cumplirá 21 el mes que viene- llegó como un jugador con proyección que debería ir creciendo poco a poco. Pero sus minutos fueron contados y nada invitaba a pensar que en caso de continuar en el Celta la cosa fuera a cambiar.
Con la cesión al equipo de Paco Herrera se busca que acumule minutos y pueda emprender ese crecimiento que parece estancado ha planeado sobre él este verano. De momento, está concentrado estos días con la selección serbia sub-21.