A años luz del arranque anterior

Xosé Ramón Castro
x. r. castro VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

XOAN CARLOS GIL

El Celta comenzó el curso muy por debajo de las prestaciones de los dos precedentes

24 ago 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Con peores sensaciones físicas, sin crear ocasiones de gol, con una posesión horizontal y nada productiva y con demasiados errores no forzados. Así comenzó el Celta el curso 16/17, toda una sorpresa negativa teniendo en cuenta que sus arranques de la mano de Berizzo siempre habían sido espectaculares. A lo largo de su trayectoria el técnico solo ha perdido una vez en la primera jornada, en el 2013 en Chile con O’Higgins ante Universidad Católica.

Diferencias

Muy lejos del nivel de la temporada pasada

El Celta había exhibido en las dos temporadas anteriores de la mano de Berizzo una entrada en el campeonato al galope, con un nivel físico espectacular, nada que ver con la puesta en escena del lunes, en donde el equipo estuvo lento, apático y desconectado, algo que no sucedió a lo largo de toda la pasada temporada. Los kilómetros recorridos por cada equipo confirman la negativa sensación física: 116 recorrió el Leganés y 107 el Celta, por debajo de su media del curso pasado. La explicación no está en una puesta a punto diferente por jugar tres competiciones ni que el equipo llegue sobrepasado o corto de preparación. 

Ocasiones

Solo dos tiros entre los tres palos

El Celta no fue nada profundo ante el Leganés. Tuvo el balón pero en realidad disparó menos a puerta que su rival, un debutante agazapado que tuvo más pegada. Porque mientras el colectivo de Berizzo adivinó dos veces los tres palos (el gol anulado a Aspas y un tiro de Orellana), los madrileños pusieron a prueba a Sergio en seis ocasiones, y una de ellas acabó en el gol del triunfo. No fue la única estadística negativa en cuenta a disparos: 8 disparos fuera de los locales por 11 de los visitantes.

Posesión

Control del balón pero plagado de horizontalidad

Fiel a su idea, el Celta quiso el balón y lo tuvo durante la mayoría del estreno. En concreto disfrutó del esférico el 64,4 % del tiempo ante el 35,7 de los pepineros, pero su franja de actuación fue el centro del campo de un modo primordial, con una sucesión de balones horizontes carentes de profundidad. Faltaron los balones al espacio de Marcelo, más errático que nunca, y que las bandas rompiesen el juego como sucede de un modo habitual.

Pérdidas de balón

Demasiados errores no forzados en los 822 pases

El gran problema para el Celta es que en ataque la producción de reduce hasta los 177 pases y en el medio campo los vigueses tuvieron errores de bulto en la distribución. Entregas al rival que originaron peligrosos contragolpes. Nunca hubo un pase de seguridad claro, sino que el riesgo fue permanente a la hora de jugar el balón y de la 183 pérdidas nacieron más de un contragolpe peligroso del rival.

Hombres claves

Orellana, de marcar en los dos estrenos anteriores a perder 36 balones

Es el mejor resumen del cambio con respecto a agosto del 2014 y 2015. En aquellas victorias del Celta Orellana había comenzado brillando y marcando y el lunes el único dato son sus 36 pérdidas de balón. Fabián jugó por dentro, en la idea de ataque total, pero no tuvo demasiada incidencia. Igual el partido le llegó demasiado tarde tras haber estado con Chile en la Copa América centenario.

Las bandas

Sin velocidad y sin sorpresas

Las bandas del Celta han sido puñales afiliados en los dos cursos precedentes. La idea, con Pione Sisto y Bongonda de cara, parecía la misma, pero el danés todavía tienen pendiente asimilar el sistema y el belga sufre la presión de querer agradar desde el primer día para asentarse en el once. Ninguno de los fueron protagonistas y los laterales del Leganés apenas sufrieron. Tan solo un poco por las subidas de los laterales. Demasiado esporádicas.

Falta de gol

Diez goles en toda la pretemporada ya avisaban

Aunque en ataque el equipo parece completo ( y de hecho cuenta con una extensa nómina) el verano ya anunció el déficit. Los vigueses marcaron diez goles en ocho contiendas, a poco más de uno por partido, y en el inicio de temporada es uno de los dos equipos que se han quedado en blanco. El otro, la Real Sociedad.

Los sucesos

El asunto Cabral no ayudó

Berizzo fue coherente y dejó a Cabral en la grada, pero el equipo se resintió en el sistema defensivo. Le faltó contundencia y ese punto de agresividad que siempre pone el argentino. Al mismo tiempo, el asunto acaparó la atención a lo largo de toda la semana y puso en duda la armonía de la que siempre ha presumido el vestuario del Celta.

Las consecuencias

Dos partidos envenenados

La derrota ante el Leganés complica el futuro inmediato, ya que a los célticos les espera el próximo sábado el Real Madrid en el Bernabéu y la vuelta del parón será el Atlético quien visite Balaídos. La enjundia de los dos rivales invita a pensar que los celestes pueden comenzar rezagados la Liga, algo que no había sucedido en las tres últimas campañas.

Confirma la necesidad de fichar

El Toto espera al menos un 10 que acelere el juego y le dé otro aire al ataque y la derrota ante el Leganés podría acelerar los hechos.