Venció por la mínima al Guijuelo con un solitario tanto de Adrián Cuesta
15 feb 2016 . Actualizado a las 10:39 h.Doce jornadas después el Celta B volvió a ganar. Lo hizo en el retorno de Alejandro Menéndez a Barreiro como entrenador del filial y en un partido que tuvo controlado en casi todo momento ante un Guijuelo en decadencia. Los vigueses aumentaron la intensidad con respecto a la época anterior y tuvieron clarividencia para mover el balón al primer intento y no detenerse en florituras en un día en donde el campo estaba muy pesado por las lluvias.
La intensidad y el juego al primer toque debieron encarrilar la contienda en el inicio, porque Luis Rioja no aprovechó dos balones al espacio filtrados tras recuperación y con la defensa del Guijuelo parada. Tampoco tuvo premio un cambio de ritmo de Gus Ledes que en el mano a mano con el portero cruzó el esférico en demasía. Los salmantinos solo existieron en la recta final del primer tiempo cuando varios cambios de orientación posibilitaron a Piojo proyectar contras vertiginosas, aunque ninguna de ellas con consecuencias.
El segundo tiempo fue una ofensiva continua del grupo de Menéndez, aunque el gol tuvo que llegar en un peculiar balón parado. Con una falta lejana (en tres cuartos) que Gus Ledes sacó buscando la espalda de la zaga del Guijuelo. Y la encontró, porque dos jugadores del Celta B llegaron al segundo palo con opción de remate y fue el novato Adrián Cuevas quien marcó con un disparo a bote pronto sin dejar caer el balón. Inapelable.
Ni con el marcador a favor Rubén de la Barrera, el gallego que entrena al Guijuelo, cambió el dibujo del 5-4-1 y como consecuencia, los salmantinos apenas tuvieron ocasiones reales aunque con el marcador a favor el Celta B fue reculando y a medida que caían los minutos la presión por ganar provocó algún lance de incertidumbre. Aun así, dos contras pudieron evitar el suspense final. En una, Pedro Martín envió el balón a la madera, y en la última, Guille finalizó su cabalgada estrellando ante Kike, seguramente el más inspirado de los visitantes. Al final el Celta B no lamentó las ocasiones perdidas y ganó su primer partido desde el 15 de noviembre. Ahora el reto es encadenar dos victorias consecutivas. Difícil teniendo en cuenta que la próxima salida será a Las Gaunas.