Eduardo Berizzo no arenga a su equipo en función de los partidos, sino que les conciencia en cada entrenamiento
11 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.«Eduardo es un tipo motivador en sí mismo», asegura Braulio Leal cuando se le pregunta por el entrenador del Celta. El futbolista, capitán del chileno O'Higgins, vivió junto al Toto las mieles y las hieles de su etapa en el club de Rancagua, y lo recuerda como un «motivador nato» que a través del trabajo diario será capaz de insuflar en su plantilla el espíritu que el equipo necesita para remontar ante el Sevilla. Un reto superlativo tanto en lo físico -el Celta tiene una plantilla corta cargada de minutos- como en lo anímico. Porque encontrar el punto justo de motivación que necesita el grupo para encarar con convencimiento el choque contra los de Unai Emery no es tarea sencilla.
«Lo de Eduardo es el día a día, el trabajo, el tratar de convencer a sus futbolistas con ese trabajo», desgrana Leal. «En los entrenamientos previos a los partidos está siempre motivando. Tiene una capacidad innata para motivar al jugador», desvela el internacional con Chile, parte del equipo que logró levantar un torneo Apertura con el Toto como entrenador.
«Acá nunca tuvimos que voltear un resultado como el 4-0 ante el Sevilla, pero jugamos encuentros importantes antes de los que Eduardo nos trasladaba sus palabras y nos arengaba, pero lo importante es el convencimiento que te traslada en el día a día». Una seguridad que Leal está convencido de que impregnará a los célticos esta noche. «Es cierto que llevaron un resultado abultado, pero lo pelarán porque los equipos de Berizzo son así, van a salir a buscar el partido en el primer minuto».
Los entrenamientos son el campo de cultivo en el que Berizzo siembra sus ideas. Traslada a sus futbolistas confianza y fe, y el convencimiento de que con su fútbol y ambición pueden llegar a donde se propongan. Luego, «el día del partido hay una arenga previa donde hay palabras importantes, pero lo principal es el trabajo diario», insiste Leal. «Antes de encuentros trascendentes no nos mandaba mensajes especiales. Lo suyo es el día a día, el trabajo y tratar de convencer al jugador con ese esfuerzo. Todo el cuerpo técnico es así. Tienen el don de motivar al futbolista».
Una capacidad que esta semana, más que nunca, se pondrá a prueba. Porque el calendario, caprichoso, ha querido que Berizzo y sus hombres busquen lo más difícil todavía tan solo tres días antes de visitar el temido Camp Nou.
«Hay que jugar un partido despojado de ataduras»
Berizzo repite que el Celta tiene que intentarlo y en sus fueros no descarta una machada, pero tampoco engaña que la empresa es más que difícil.
¿Cómo afronta el Toto la vuelta de semifinales? «Con optimismo, sabiendo que debemos ir con valentía, con decisión, con nuestro fútbol, atacando continuamente como siempre hacemos y a partir de lo que saquemos del partido encontraremos alicientes e impulsos que nos lleven a más. Creo que hay que jugar un partido despojado de ataduras, sabiendo que nos enfrentamos a un rival fuerte que ya conocemos, con sus debilidades y defectos y hay que encontrarle con fútbol los espacios necesarios para poderles atacar».
La clave, para el Toto, está en el equilibrio en el juego, pero sobre todo en que su equipo sea capaz de llevar el balón en condiciones al borde del área: «Hay que encontrar con precisión el borde del área del Sevilla. Jugar al pase en corto en la zona peligrosa del área, inclusive dentro, para, con movimento en banda, que la pelota nos dé profundidad. Queremos encontrar el área rival, y en el área rival hemos tenido muchas opciones de tiro a gol. Ese es el partido que tenemos que proponer y provocar».
Descarta por completo Berizzo que el tener que buscar cinco goles para pasar la eliminatoria condicione el plan de juego. Básicamente, porque el Celta casi siempre va arriba con todo: «No condiciona porque no somos un equipo especulativo, nadie se reserva nada. No hacemos del partido una cosas lánguida, sino que vamos a buscarlo con decisión y eso haremos sabiendo que necesitamos goles. Eso nos impulsa más, pero jugando de la misma manera que siempre lo hacemos».
El apoyo
Al margen de agradecer todo el apoyo que el Celta está recibiendo de su afición, especialmente después de varapalo del jueves en la ida de Sevilla, el entrenador considera que hoy pueden darle un plus al equipo: «Creo que la gente se siente orgullosa de su equipo y el jueves tendremos que crear un puente para que uno tire del otro constantemente para que el partido se sostenga anímicamente con un nivel excitante. Cuando jugamos de esa manera, excitados, al ataque, imprimiéndole un ritmo vertiginoso a nuestro juego, somos un equipo muy peligroso».
Dicho esto, también quiso recordar a quién tendrán enfrente esta noche: «Hay datos que obligan a ser mesurados. Jugamos contra un equipo como el Sevilla que es un equipo difícil con una diferencia importante», para finalizar descubriendo la idea que le empuja al partido: «No puedo prometer nada porque en el fútbol nada es sinónimo de cosa segura, pero sí que lo vamos a intentar».