Los aficionados que creyeron en las posibilidades que tenía el equipo hace tres años de permanecer en primera se resisten a cualquier adiós a la Copa previo al pitido final del jueves
08 feb 2016 . Actualizado a las 20:41 h.El celtismo ha aprendido a no tirar la toalla, a creer hasta el último suspiro. A muchos, aquellos que componen el sector más joven de la afición, probablemente se lo enseñó el famoso 4 % de posibilidades de permanecer en Primera que tenía el equipo hace casi tres años a falta de dos partidos por disputarse. Pero entonces, en junio del 2013, el equipo desafió a los números y se salvó contra pronóstico. Los celtistas que creyeron entonces se resisten a cualquier adiós a la Copa previo al pitido final del jueves.
Por eso ayer las peñas celtistas, junto con muchos aficionados que se sumaron a título individual, decidieron recuperar aquella estadística. La de la llamada cofradía del 4 %. El espíritu de aquella gesta les lleva a mantener la esperanza de que, con 90 minutos por delante -y en un Balaídos que seguro volverán a intentar dotar del ambiente que consiguieron darle en la ida de cuartos frente al Atlético-, todo pueda pasar. Porque, mantienen, de lamentarse ya habrá tiempo cuando la eliminación sea un hecho. «Por ilusión e por empurrar non hai que nos gañe», escribía la peña Siareiros junto con una imagen que compartieron en la tarde de ayer diferentes colectivos, alusiva a ese espíritu del 4 % y a la necesidad de «cinco goles para facer historia». De fondo, uno de los recibimientos con bengaleo al equipo.
El mensaje elegido por Preferencia para acompañar esa instatnánea fue «somos o celtismo, ningún resultado nos aparta do noso soño. O xoves facemos historia», mientras que Zeru Urdin apostó por «foi unha batalla, non a guerra». Se sumaron también otras como Jorge Otero («Non nos renderemos») o la Peña Alcoyana («¡Lo conseguiremos!»).
Por su parte, Centolos Celestes advirtió de que no serán «dos que se estén arrepentindo toda a vida de non ter estado en Balaidos o 11/02/16». Norte Celeste o Siareiros Dezaos fueron solo algunas más de las que se sumaron a la iniciativa.
Unos 150 aficionados estuvieron además ayer en A Madroa y Rubén quiso darles las gracias. «Nos apoyan siempre en los buenos y en los malos momentos. Estamos jugando una semifinal de Copa y mientras haya una mínima posibilidad vamos a agarrarnos a ella y les necesitamos más que nunca».