Con la mochila cargada de deberes

Xosé Ramón Castro
x. r. castro VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

Oscar Vázquez

El Celta tiene tres semanas para enmendar su endeblez defensiva, rentabilizar sus ocasiones, asentar el equipo y perfilar la sala de máquinas, los déficits más preocupantes de la gira alemana

27 jul 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Aunque con la pretemporada más avanzada, el Celta regresó el curso pasado de Inglaterra con las alforjas llenas de ilusión y de juego. En esta ocasión, los celestes volvieron ayer de Alemania con la mochila cargada de tareas pendientes para las largas tres semanas que todavía restan para el campeonato. El equipo vuelve con un único triunfo, dos derrotas y un empate, pero más allá de los inservibles números del verano, el paseo celeste por el corazón de la eurozona emite síntomas preocupantes en cuanto a la fiabilidad defensiva, deja al descubierto que el puzle de la sala de máquinas aún está por engranar y que, por el momento, la rentabilidad ofensiva sigue siendo deficitaria. Por encima, aparece el lunar de las trifulcas. Los vigueses han tenido conflictos en tres de los cuatro partidos disputados.

DEFENSA

Goles encajados en los cuatro partidos y muchas licencias. Alemania y Austria no pudieron ver la mejor versión de la defensa céltica. El equipo de Berizzo encajó goles en las cuatro citas, en las tres últimas al inicio de la contienda, lo que puso cuesta arriba el desarrollo del juego. En algunos casos dando facilidades al rival, especialmente ante el Galatasaray, que aprovechó su oportunidad para marcar por dos veces pese a desarrollar una floja actuación. En los cuatro partidos disputados hasta la fecha han aflorado también los errores individuales, en concreto por el centro. El balón parado sigue siendo un déficit, con el rival rematando en la mayoría de los casos. La llegada de un cuarto central podría ayudar a solidificar la retaguardia.

RENTABILIDAD

Las ocasiones de gol no tienen correspondencia con el acierto. Dejando a un lado el acierto del primer partido, el Celta fue claro dominador y generó ocasiones suficientes como para ganar ante el Núremberg y el Galatasaray, pero no sacó adelante ninguno de los dos partidos. Especialmente desacertado en el remate estuvo el equipo ante los otomanos. La temporada pasada, el cuadro de Berizzo pagó con una larga sequía el mismo problema. Generaba mucho más de lo que recogía. El acierto es primordial para un conjunto que expone tanto en la presión y que por norma no escatima esfuerzo.

EL TRIVOTE

La alargada sombra de Krohn-Dehli. El centro del campo del Celta no es el mismo sin Krohn-Dehli. El danés era el eslabón perfecto entre la contención de Augusto y la conexión ofensiva con Orellana, pero su marcha al Sevilla ha dejado un hueco que quedó en evidencia en Alemania. Augusto y Radoja no combinan en el doble pivote, el Tucu alterna buenos minutos con otros más discretos y Wass necesita tiempo, pero a día de hoy no parece el mismo perfil de jugador que su compatriota. Berizzo ha matizado sus dibujos en la medular, pero por el momento no ha encontrado la solución perfecta.

EL EQUIPO

Un once casi definido, pero por equilibrar. La idea de equipo del técnico argentino no debe ser nada diferente de la que baraja casi todo el celtismo, pero falta coser las costuras de un once que se ha partido con demasiada facilidad, que solo ha hecho gala de su intensidad ante el Galatasaray y que se ha prodigado más de la cuenta en el juego horizontal.

LOS INCIDENTES

Trifulcas en tres de los cuatro partidos. No es para rasgarse las vestiduras, pero tampoco para pasar página. Que los célticos hayan tenido trifulcas en los tres últimos partidos recomiendan un toque de atención a tiempo por parte de los responsables del club. No es la mejor carta de presentación para un club que quiere ser modélico en todos los apartados. En esta ocasión no se le pueden imputar a la intensidad del juego.

Berizzo cierra los entrenos en A Madroa en pleno estío

Eduardo Berizzo no ha querido esperar al preámbulo de la temporada para entrenar a puerta cerrada. El club hizo oficial ayer el plan de entrenamientos de la semana que hoy comienza a través de su página oficial y tan solo la sesión del jueves será de acceso libre para todo el público. Además, desaparecen del mapa las dobles sesiones características del verano y solo se mantiene el programa doble para el jueves.

Los célticos, que regresaron en la tarde de ayer de la gira alemana, gozan ahora de dos días de descanso y el miércoles comenzarán a entrenar de nuevo en A Madroa a las diez de la mañana.

Ese horario se repetirá todos los días hasta el sábado incluido, mientras el domingo será día de descanso. En la hoja de ruta no está programado ningún amistoso, aunque la opción no puede descartarse ya que el equipo necesita aumentar su rodaje tras lo visto en Alemania.

Pendientes de la recuperación de Nolito y de la evolución de Hugo Mallo

Nolito, el jugador más determinante del Celta la pasada temporada, todavía no ha tenido la oportunidad de disputar un solo minuto en un partido de pretemporada. Llegó tarde a la concentración después de estar con la selección española y desde hace días padece una sobrecarga en el isquiotibial derecho que le limita a la hora de trabajar.

El sanluqueño había marcado cinco goles el verano pasado y atravesaba un estado de forma envidiable en el preámbulo de la Liga. Se supone que para la próxima cita amistosa (por determinar) ya debería de estar disponible.

Hugo Mallo fue el gran perjudicado del partido del sábado en Ingolstadt. Apenas jugó un cuarto de hora y regresó a casa con un esguince en el tobillo derecho que le harán descansar en los próximos días. El canterano estaba pendiente de someterse a pruebas médicas para conocer el alcance de una lesión que le viene a cortar un excelente punto de forma.

Por otra parte Guidetti sigue sin debutar, pero el sueco está en condiciones. Su presencia en el equipo (si accede a la titularidad) pudiera condicionar la colocación de los hombres, ya que en teoría llega para la posición de nueve.