Un reto pendiente desde otra época

Xosé Ramón Castro
X. R. Castro VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

JOSE JORDAN | AFP

El Celta se traza el objetivo de superar los 50 puntos, algo que solo ha conseguido en diez ocasiones

19 may 2015 . Actualizado a las 10:06 h.

Mejorar los números de Luis Enrique del curso pasado y superar la barrera de los 50 puntos por décimo primera vez en las 49 temporada que ha disputado en Primera División, se convierte en el reto del Celta para la última jornada de Liga después de quedarse sin opciones matemáticas de luchar por la séptima plaza. También, intentar mejorar el noveno puesto, algo que se antoja muy difícil teniendo en cuenta que los vigueses tienen a tres equipos por delante: Espanyol y Rayo Vallecano con un punto más y el Málaga con dos. Los tres todavía en la lucha por Europa, aunque los dos últimos de un modo virtual. En el octavo puesto había colocado el presidente Carlos Mouriño su listón más ambicioso para el periplo que está a punto de concluir.

Han pasado nueve largos años desde que el conjunto celeste fue capaz de superar el muro de los 50 puntos. Sucedió en la campaña 05/06, la última que se metió en Europa, cuando el conjunto entonces preparado por Fernando Vázquez sumó 64 puntos, la mayor puntuación de la historia igualando el registro de la campaña 98/99.

Porque salvo los años de opulencia, el Celta casi siempre ha vivido muy lejos de la cifra redonda. De hecho, a lo largo de su historia ha sido capaz de hacerlo en una decena de ocasiones. La primera, en la mítica 70/71, cuando los 50 puntos y el sexto puesto posibilitaron la primera clasificación continental para medirse con el Aberdeen escocés. Desde entonces tuvieron que esperar 17 años para volver a superar el medio centenar de puntos. Todo cambió mediados los noventa, cuando el crecimiento del club convirtió el dato en habitual por única vez en la historia (ocho veces en once temporadas).

Los números de equipo importante dejaron de existir en el 2006. Al curso siguiente llegó el descenso, el lustro en el infierno y ahora la recuperación. Luis Enrique dejó al equipo con 49 puntos y noveno, y Berizzo no quiere, ni debe, desperdiciar la oportunidad de marcharse de vacaciones con 51. De hecho, su primer mensaje de la semana, nada más quedar fuera de Europa fue alertar a sus jugadores del reto que estaba en juego para la despedida. Que pese a no jugarse puesto alguno, todos los entrenamientos de la semana (menos uno) vayan a ser a puerta cerrada también es un síntoma a tener en cuenta. El Espanyol no se encontrará un rival de vacaciones.

Álex López, en su comparecencia, descartó que vayan a relajarse: «Escapouse o obxectivo que tiñamos agora, pero é para estar ledos e satisfeitos co traballo que fixemos. Agora hai que tentar rematar a campaña do mellor xeito posible. Penso que podemos considerar unha tempada de notable».

Queda la duda de si este equipo estaba para hacer algo más. La impresión general es que sí, por juego, por potencial y por lo exhibido por la plantilla a lo largo del curso. Pero las diez jornadas en blanco y Almería frustraron el sueño.