La pizarra camaleónica del Celta

Xosé Ramón Castro
x. r. castro VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

XOAN CARLOS GIL

Los vigueses han cambiado de dibujo en cuatro ocasiones en el 2015

18 feb 2015 . Actualizado a las 10:05 h.

El Celta demuestra una capacidad camaleónica para ajustarse a los dibujos que Berizzo propone. Partiendo del 4-3-3 que le acompañó hasta el primer partido del año, han dado un giro para jugar con un doble pivote creativo y un media punta, una figura desconocida hasta la fecha. Todo, después de un ligero rodeo de 45 minutos con una zaga de cinco ante el Valencia. En los cuatro escenarios han respondidos los celestes y todos ellos han resultado importantes para salir de la crisis.

4-2-1-3

El invento que aplastó al campeón

La última vuelta de tuerca al dibujo la firmó el Celta en la contienda del domingo. Berizzo partió del dibujo más habitual, pero invirtió la cuña del medio campo, llevando a Krohn-Dehli a explorar la media punta y mezclando a Augusto con Radoja en el doble pivote. La presencia del serbio le ofreció un comodín por el mismo precio, ya que Nemanja se metió entre los centrales siempre que fue necesario, especialmente durante varias fases del juego en el segundo tiempo.

4-2-3-1

La fórmula para salir de la crisis

Fue la apuesta del Toto en el partido con el Córdoba. Con diez jornadas encima sin ganar, los celestes buscaron soluciones apostando por el once más ofensivo posible, con dos jugadores creativos como Krohn-Dehli y Augusto en el doble pivote, Orellana en la posición de enganche y Santi Mina, Larrivey y Nolito en el ataque. La idea supuso el reencuentro con el triunfo y tuvo continuidad en Anoeta, en donde fue Álex quien comenzó en la posición de enganche por la ausencia del chileno. Luego, en el segundo tiempo, Berizzo tuvo que recomponer el equipo en cuanto a hombres, pero con la misma idea de juego.

5-2-1-2

La ruptura con la tradición

El Celta solo lo utilizó durante 45 minutos en la contienda con el Valencia. Al jugar con dos puntas el cuadro ché, Berizzo metió como central a Radoja desde el pitido inicial, algo que había hecho de un modo esporádico en otras citas. Fue también la primera vez que Augusto probó como pivote defensivo, en el que Orellana ofició de segundo delantero y los laterales fueron extremos. La lesión de Hugo Mallo le impidió seguir con el plan.

4-3-3

La idea de inicio y que sigue actuando como matriz

Desde la primera jornada y hasta el arranque del 2015, el Celta había apostado una y otra vez por el trivote y los tres delanteros como dibujo, con ligeras correcciones en función del desarrollo de los partidos. El sistema sigue siendo el punto de partida, pero ha pasado a mejor vida. Ya no es un dogma de fe.