Veteranía y polivalencia europea para un equipo joven que encara la lucha por la permanencia
GRADA DE RÍO
Veteranía y polivalencia. Esas son las palabras que acompañan la llegada de Danijel Pranjic al Celta de Vigo. En medio de una plantilla joven y con limitada experiencia en Primera División, surge la figura de un futbolista curtido y con experiencia internacional a sus espaldas. Su carta de presentación transmite un poso que el equipo celeste necesitará en la segunda vuelta. Los de Paco Herrera se preparan para escalar una montaña cargada de exigencia y coronada por una salvación que requerirá alrededor de ocho victorias. En esa ascensión habrá momentos duros en los que la veteranía será un grado. Y ahí entra Pranjic.
Dueño de la banda izquierda
La banda izquierda es el feudo del nuevo centrocampista celeste. Asegura sentirse cómodo como interior o extremo. Tiene capacidad organizadora al lado de un pivote defensivo y también puede desarrollarse en el lateral si Herrera se lo exige. Rápido, bueno en el juego colectivo y con buenos centros, asegura que se adapta a lo que el técnico reclama. A lo largo de su dilatada carrera ha jugado como defensa central, lateral zurdo, centrocampista y carrilero. Su buen papel en el NK Osijek y el Dinamo de Zagreb, hizo que el Heerenveen se fijase en él. Corría el año 2005. En el club holandés militó durante cuatro temporadas, consiguiendo un título copero. Languideciendo su etapa holandesa, Pranjic quiso buscar un hueco en la Liga española. El Betis puso gran interés por hacerse con sus servicios en 2008, pero no llegó a un acuerdo con el Heerenveen. Más tarde se presentaría la oportunidad de jugar en la Bundesliga, entrando por la puerta grande. Se incorporó al Bayern Múnich, que había pagado por su traspaso 8,5 millones de euros, donde ha militado las tres últimas temporadas y con el que ha vivido la experiencia de la Champions. En verano de 2012 el Sporting de Lisboa se hizo con sus servicios, aunque no ha llegado a asentarse en el equipo. El jugador croata tiene a cuestas 45 internacionalidades con su selección, en la que tuvo un papel destacado en la Eurocopa de 2008 (también estuvo en Polonia y Ucrania). Ahora afronta un nuevo reto. La Liga.