Un año después, la polémica sigue rodeando la muerte de Gustavo Cerati

La Voz

GENTE

Reuters

Miles de personas han recordado al mítico músico con mensajes de recuerdo en las redes sociales

04 sep 2015 . Actualizado a las 12:11 h.

Los excesos sentenciaron a Gustavo Cerati un 4 de septiembre del 2014. Sin embargo, la batalla había comenzado a perderse ya cuatro años antes. El 16 de mayo del 2010, Gustavo Cerati se desvanecía en medio de uno de sus conciertos en Caracas, después de sufrir un derrame cerebral por la obstrucción de la arteria carótida interna izquierda. 

Un respirador artificial mantuvo su corazón con vida hasta que el verano pasado la infección respiratoria que padecía comenzó a complicarse. Miles de personas han querido recordar a la figura del rock en el primer aniversario de su muerte. La comunidad tuitera ha aupado a la categoría de trending topic su hashtag #UnAñoSinCerati

El pasado 11 de agosto, coincidiendo con el aniversario de su cumpleaños, salía a la luz una polémica biografía que analizaba el trasfondo de todo lo ocurrido aquella noche en Venezuela. Cerati: La Biografía reconstruye las últimas horas de Gustavo Cerati con cierta polémica, ya que su familia y amigos han llegado a calificar el texto de impreciso y carente de veracidad. La decisión del periodista Juan Morris, autor de la polémica obra, de incluir las declaraciones de las exnovias del compositor, así como el contacto con los compañeros de primaria y sus amigos de la facultad, sus colegas más íntimos y su tía y su abuela, ha indignado a sus familares. 

«Se dio la vuelta para decirle algo a Gustavo y lo vio pálido, con los ojos desorbitados. -¿Te sentís bien?-, le preguntó. Gustavo abrió la boca para contestarle, pero no acertó a decirle nada. Fue como si los músculos de su mandíbula no encontraran las palabras. Entonces la cámara disparó su flash y todo el equipo quedó registrado en la última foto de la gira. A su alrededor el grupo se empezó dispersar y Gustavo caminó confundido hacia su camarín. Mientras lo veía alejarse, Taverna le pidió a Bernaudo que lo acompañara a ver qué le pasaba. Cuando entraron, Gustavo estaba tirado en el sillón, con el saco a un costado, la camisa desabrochada y la boca entreabierta. Pensaron que tenía un pico de presión o que tal vez le había dado un infarto. Bernaudo corrió a buscar a los paramédicos y al ratito volvió con dos chicos que no tendrían más de viente años y que al ver a Gustavo Cerati descompensado no supieron qué hacer. Charly Michel, el kinesiólogo que viajaba con el equipo, revisó qué remedios tenían los paramédicos en sus bolsos y les pidió que fueran a buscar la camilla. Gustavo se podía mover pero estaba como abrumado, lento, y no podía hablar».

Este fue el final de una larga temporada de excesos. La gira americana de Gustavo Cerati, según publicaba Las2orillas del año 2010 fue un cóctel continuo de noches sin fin, drogas, tabaco, sexo y alcohol. Y su cuerpo comenzó a mostrarlo. Demacrado y delgado, Cerati recurría habitualmente a la viagra para mantener relaciones sexuales con la que entonces era su novia, Chloé Bello, una joven modelo que después del accidente fue acusada por la familia del cantante de ser la única culpable de los excesos en los que chapoteaba de buena gana el mítico argentino.