Empiezan a tomar forma los rumores sobre el compromiso del hijo del Carlos de Inglaterra y su novia Cressida
14 mar 2014 . Actualizado a las 21:54 h.Con Harry (29 años) y Cressida (25) los medios siguen los mismos pasos que con Guillermo y Catalina para identificar algún signo de compromiso. Y parece que no se equivocan cuando afirman que hay una nueva boda a la vista en la familia real británica. El pasado otoño, Cressy, como llaman a la joven cariñosamente, estuvo de visita en la residencia campestre de la reina Isabel II en Sandringham. Diarios como The Sun pronto se apresuraron a recordar que Catalina también fue presentada así a la familia del príncipe Guillermo. Más tarde salió a la luz que la escapada de fin de semana se produjo junto con un gran grupo de amigos.
Pero las especulaciones no perdieron ni pizca de fuerza. Después de que a principios de año se hablara de una ruptura, Harry y su novia acudieron juntos el pasado fin de semana a dos actos. Las fotos pronto inundaron todos los periódicos., acompañadas del rumor de que la joven sería invitada este verano a la residencia de Balmoral, en Escocia. Allí estuvo Catalina con sus padres unos meses antes de la pedida de mano.
Sin embargo, a primera vista, Catalina y Cressida no tienen mucho en común. Mientras que la primera luce siempre una imagen perfecta, con estilismos cuidados y un comportamiento impecable, Cressy luce un característico estilo rockero y una melena rubia sin complicaciones. La ahora esposa del príncipe del mayor de los hermanos terminó estudios de Historia del Arte en la universidad. Cressy, en cambio, tiene formación como bailarina y trabaja actualmente en Londres en temas de márketing. Catalina procede de una familia de clase media acomodada, mientras que Cressida es la hija de una noble con un pasado rebelde y cuatro exmaridos.
Los medios más recelosos aseguran que la intención de Harry es imitar a su hermano mayor y dejar pasar un tiempo considerable de relación antes de casarse. Tras la desastrosa experiencia de su padre Carlos, enfrentado en una auténtica «guerra de los Rose» con su madre Diana durante años, y la alta tasa de divorcios entre sus tíos y tías, es bastante probable que el hijo menor del príncipe de Gales se lo piense dos veces antes de dar el paso.
Harry no parece un joven de relaciones breves, pese a su fama de seductor y «chico malo» de la Casa Real. Con su exnovia Chelsy Davy estuvo seis años. Antes de conocer a Cressy se corrió la voz de que Harry estuvo con una modelo de ropa interior, pero salvo algún desliz no hubo mayores escándalos en la vida amorosa del cuarto en la línea de sucesión al trono británico.
Presuntos «amigos» han confesado a medios poco serios como el Daily Star y el Daily Express que Harry quiere una familia y tener hijos pronto. Pero también en este caso vale lo que dijo un portavoz de la casa real poco antes de la boda de Guillermo con Catalina: «El que sabe algo, calla; y si alguien dice algo es un signo de que seguro que no sabe nada».