El cocinero con espíritu rock al que adoran Bill Gates y Jeff Bezos

TANIA CIDONCHA

SABE BIEN

cedida

El chef valenciano Perfecto Rocher y su socia y compañera, Alia Zaine, ofrecen en su restaurante estadounidense «Tarsan I Jane» una experiencia gastronómica de base española a la que no han podido resistirse los fundadores de Amazon y Microsoft.

23 sep 2018 . Actualizado a las 05:20 h.

Los fundadores de Amazon y Microsoft son asiduos en la restringida lista de diez comensales diarios que, como máximo, atienden en este exclusivo restaurante de Seattle, donde se encuentran las sedes de las dos empresas. «Son personas como nosotros que se lo han currado, a las que les gusta probar conceptos y cosas nuevas, y ver a personas que están haciendo cosas arriesgadas. Imagino que piensan que yo estoy en ese garaje en el que ellos estuvieron una vez», explica en relación al origen de esos dos gigantes mundiales. En su opinión, sus multimillonarios clientes deben pensar que con diez comensales al día no está «haciendo un duro», pero valoran que tiene una «idea» y la defiende. «Eso creo que les motiva; es como verse a ellos mismos cuando empezaron», opina sobre un tipo de adinerado cliente a los que ve como «gente sencilla». El chef de 40 años y su pareja, angelina de origen, empezaron cocinando en la calle, haciendo «pop ups» (restaurantes itinerantes) hasta abrir Tarzan I Jane en 2016.

Tras sumergirse en la profesión culinaria en restaurantes de estrella Michelin, llegó a EE.UU en 2002 para quedarse. Trabajó en importantes proyectos en San Francisco, como el restaurante Gary Danko, o en Los Ángeles, donde se sumó al equipo de The BLVD y Smoke.Oil.Salt, del que se encapricharon las estrellas de Hollywood, y que fue nombrado en 2014 por la revista GQ entre los 10 mejores restaurantes del país. El fallecido premio Pullitzer Jonathan Gold llegó a comentar en el diario Los Ángeles Times que «un porcentaje alarmante de las mejores paellas que he comido provienen de las sartenes de acero bien sazonadas de Perfecto Rocher».

Pero su espíritu rock punk nunca cuajó en la superficial ciudad de las estrellas de Hollywood y en 2016 consiguió abrir su concepto personal en el barrio de Frelard, en Seattle.

Como en casa

Al contrario de la tendencia habitual de los restauradores de expandir sus negocios, el equipo Rocher asegura que trabaja en un concepto de restaurante para el futuro. Por eso, se centraron en reducir sus comensales «por la calidad y la súper conexión» que se establece con esas diez personas a los que sirven. Rocher y su pareja quieren hacer sentir al cliente «como en casa», pero siempre de una manera «muy profesional», pues, para ellos, el concepto de la cocina refinada no tiene que ser necesariamente algo excesivamente «serio». «El cliente, con los Rocher, solo elige el numero de platos y se deja seducir (...) Alia (Jane) es el alma, porque conoce todo el proceso, ha sido cocinera, carnicera, ha trabajado en las mejores granjas de Europa y lleva la sala con ese toque mágico de los que conocen bien el oficio», comenta Rocher. Su compromiso con la autenticidad que destila su cocina marca diferencias con muchos de los restauradores que tratan de educar sobre la gastronomía española en EE.UU. «Elijo ingredientes en mi cocina porque me gustan a mí, no para agradar al paladar americano. Si eres un cocinero español y piensas en llenar tu restaurante en lugar de hacer tu cocina, al final no eres feliz», explica Perfecto Rocher.